La Guardia Civil ha detenido en Málaga a un hombre de 50 años, acusado de abusar sexualmente de una niña de 10 años. El hombre, que vivía con la familia de manera temporal, aprovechó una breve ausencia de los progenitores de la menor para acometer los abusos sexuales.
El detenido, que trabajaba con el padre de la niña, ya había residido en la vivienda en anteriores ocasiones, por lo que la familia confiaba en él. Sin embargo, esta confianza se esfumó cuando los padres llegaron a casa después de realizar unos recados.
Inmediatamente después del regreso, la menor relató lo sucedido a su madre y se inició una fuerte discusión entre la progenitora y el agresor. La disputa finalizó cuando la mujer echó de su vivienda al supuesto abusador y presentó una denuncia ante la Guardia Civil.
Los agentes de la Guardia Civil dieron veracidad a los hechos ocurridos tras explorar a la menor, por lo que realizaron una serie de gestiones para localizar al agresor. Una vez identificado, los agentes lo localizaron en un país europeo, a donde huyó para evadir sus responsabilidades.
Tras mantener una conversación telefónica con el agresor, la Guardia Civil le convenció de que regresara a España de manera voluntaria para responder legalmente a la denuncia interpuesta contra él.
El hombre fue detenido el 13 de junio, cuando aterrizó en el aeropuerto de Málaga y fue puesto a disposición judicial acusado de un delito de abuso sexual.