Los detenidos por la muerte de Enrique, el hombre fallecido en un hotel de Oleiros, A Coruña, durante la celebración de Nochevieja, han contado al juez cómo ocurrieron los hechos.
“Han dado su versión de los hechos. Es una pelea con un resultado fortuito absolutamente”, ha dicho José Ramón Sierra, abogado de los acusados.
Los agresores han manifestado que la pelea comenzó dentro del hotel y continuó en la terraza. Según su versión, se repartieron empujones y puñetazos y no tuvieron intención de matarle.
“La causa de la muerte no es el golpe con un cenicero, –eso, fijo–, sino más bien un golpe que posiblemente tenga en la cabeza, en la nuca, el fallecido al caer”, ha asegurado el abogado de los acusados.
La autopsia al cuerpo de Enrique será determinante para conocer cómo se produjo. Su familia fue testigo de su muerte. Celebraban la llegada de Año Nuevo, y todos están destrozados.
“Solamente sabe decir ‘yo me quiero morir’ y ‘yo me quiero morir’”: es lo que, como cuentan sus allegados, repite la mujer del fallecido.