Funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría Provincial de León detuvieron en la capital leonesa a tres individuos de nacionalidad rumana de 40, 29 y 23 años como presuntos autores de los delitos de detención ilegal, lesiones, coacciones y proxenetismo. Dos de ellos han ingresado en prisión y el tercero se encuentra en el Complejo Hospitalario.
Los hechos tienen su origen hace unos dos meses, con ocasión de haber captado dichos individuos a una mujer joven de su misma nacionalidad en una discoteca de Rumanía y haberle ofrecido un puesto de trabajo como empleada de hogar en León, tras lo que se desplazó a la ciudad leonesa en autobús acompañada de dos de los detenidos.
Una vez en la capital, la joven fue retenida en un piso que los autores tenían alquilado en una céntrica calle, en el que ya se encontraban otras dos jóvenes rumanas en las mismas condiciones, según informó la Dirección General de la Policía y de la Guardia Civil.
Las tres mujeres eran obligadas a ejercer la prostitución en un club de alterne de la ciudad, siempre bajo su vigilancia. Cuando las ganancias generadas por su trabajo no eran las esperadas, eran vejadas y agredidas por los mismos, que llegaron incluso a efectuarles heridas cortantes con cuchillas en los antebrazos.
Debido a la estrecha vigilancia a la que estaban sometidas y a las continuas amenazas de muerte a sus familiares en Rumanía, las jóvenes no se atrevieron a denunciar los hechos hasta que, con motivo de un ajuste de cuentas con otros individuos rumanos dedicados también al proxenetismo, se produjo una reyerta en la que fueron detenidos el pasado sábado día 2 los tres individuos, hecho que incidió en que las jóvenes procedieran a interponer la correspondiente denuncia.
Dos de los detenidos se encuentran ingresados en prisión por orden judicial, mientras que el tercero de ellos permanece detenido, a disposición judicial, en el módulo de seguridad del Hospital de León, donde se recupera de una lesión sufrida como consecuencia de la huida.