Pedro Uruñuela (La Rioja, 1947) fue director de instituto, inspector de educación, subdirector general de Alta Inspección del Ministerio de Educación y fundador de la asociación Convives, que fomenta la convivencia en la escuela.
Hoy ha acudido a Logroño para participar en una jornada organizada por FETE-UGT, en el Ateneo Riojano, sobre 'bullying' escolar como experto y coordinador del proyecto de desarrollo de convivencia 'Turkana', en el que han participado diez institutos de Madrid.
A su juicio, el acoso escolar no ha crecido, "se habla más de él". De hecho, España se encuentra en un "nivel inferior" a otros países, con porcentajes de entre el 3,8 y el cuatro por ciento. Una cifra que, según ha reconocido, no le deja "nada tranquilo" y apuesta por lograr el "cero por ciento".
Esta cifra, ha dicho, "se puede conseguir", pero "el principal enemigo" es la sociedad, que es "muy violenta" y hay "contraejemplos a todos los niveles". Con ello, se ha referido al mal ejemplo que se da a los jóvenes cuando se concede el premio al "mejor futbolista" a un jugador que protagoniza un actitud violenta en el campo. "Le estamos diciendo al niño que eso está bien", ha apostillado.
Ha reconocido que estos ejemplos le "preocupan mucho" porque arruinan el trabajo que se pueda hacer en casa y en el colegio. A su juicio, el acoso escolar se manifiesta en los centros escolares, pero "es expresión de la violencia en la sociedad".
EL ACOSO SE OCULTA A PADRES Y PROFESORES
Uno de los principales problemas del acoso es que "permanece oculto" a los padres y a los profesores. Ante esto, hay unas "pistas" para detectar una posible víctima, como el cambio de comportamiento, si muestra tristeza, si insiste en que no quiere ir al colegio o empieza con síntomas corporales que no se corresponden con una patología, como dolor de tripa, o de cabeza.
Para el profesorado hay unos cuestionarios, pruebas en el ordenador que se pueden hacer desde la tutoría y este experto ha invitado a todos los docentes a evaluar, periódicamente, qué alumno está aislado, o tiene menos amigos porque pueden ser "candidatos" a sufrir acoso.
En el caso de detectar los padres que su hijo puede sufrir acoso, recomienda ir al centro a hablar con la dirección y tutor.
ES MÁS DIFÍCIL DETECTAR AL HIJO ACOSADOR
Por el contrario, es más difícil detectar si un niño es acosador. En cualquier caso los agresores se caracterizan por "falta de empatía", son "incapaces de ponerse en el lugar del otro", tienen "falta de compasión ante dolor de otras personas".
Uruñuela ha insistido en que "es más importante prevenir que curar" y, sin esperar a que haya ningún caso trabajar "la convivencia positiva, las competencias sociales y éticos".
En casa se puede "desarrollar las competencias socio emocionales, aprender a dialogar, ser asertivo, defender tus derechos, y solucionar conflictos", porque "eso es enseñar a pescar".
El "reto", por último, es investigar "el acoso a través de la red", mucho más "difícil de detectar, por el anonimato".