Experta advierte de que al volver al colegio, los padres deben actualizar el informe médico del niño y los medicamentos

EUROPA PRESS 07/09/2016 12:46

Cualquier niño que sea asmático, presente hiperreactividad bronquial o tenga facilidad para que "los catarros se le bajen al pecho" debe tener su inhalador en el colegio. "Dado que los niños pasan muchas horas en la escuela, en cualquier momento, en clase de gimnasia o en el recreo, se les puede desencadenar un broncoespasmo", ha destacado la alergóloga infantil del hospital, Cristina Ortega Casanueva.

Además, "si presenta una alergia alimentaria y el niño desayuna o come habitualmente en el colegio, es muy importante avisar a los profesores de que alergia tiene y que medicación se le debe administrar en cada momento según los síntomas", añade la experta.

Otro de los motivos de actualizar la historia clínica del niño es que, durante el verano, puede haber cogido o perdido peso y, por tanto, las dosis de los jarabes deben ser comprobadas.

UNA BOLSA CON TODA LA INFORMACIÓN

Desde el hospital se aconseja preparar una bolsa con toda la medicación del niño y, dentro de ella, se debe meter también el informe médico con las dosis exactas y con los pasos a seguir de una forma clara y fácil de entender para que, si surge la necesidad de administrarla en el horario escolar, no se cree confusión o dudas al profesorado.

"En el caso de que el médico paute la pluma precargada de adrenalina por riesgo potencial de anafilaxia, es conveniente que junto a la misma estén las indicaciones de cómo administrarla, ya que no es algo intuitivo y su manejo debe ser conocido", ha puntualizado.

En este sentido, en el hospital se les entrega a los pacientes alérgicos un 'Plan de actuación ante una anafilaxia en centros educativos', un documento explicativo con dibujos. Este documento está disponible en la web de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP).