El cloro y el sol favorecen la aparición de conjuntivitis e infecciones oculares

EUROPA PRESS 17/06/2015 13:14

Para evitar estas irritaciones e infecciones oculares, el director médico de Clínica Baviera, el doctor Fernando Llovet, recomienda "extremar las medidas higiénicas y de protección, como utilizar gafas de buceo, no compartir toallas para evitar posibles contagios y proteger los ojos con lentes oscuras, envolventes y con filtros UV en caso de exposiciones prolongadas a los rayos solares".

El cloro, utilizado para higienizar el agua de las piscinas, puede favorecer la aparición de conjuntivitis irritativas, víricas o bacterianas, que causan enrojecimiento y escozor ocular, sensación de cuerpo extraño, lagrimeo e hipersensibilidad a la luz. En el caso de sufrir cualquiera de estos síntomas se debe acudir al oftalmólogo para que indique el tratamiento más adecuado.

La protección ocular es especialmente importante en las personas que usan lentes de contacto ya que, como afirma Llovet, "los virus y bacterias se adhieren a las lentes con facilidad. Esta circunstancia hace que las precauciones hayan de ser aún mayores e incluir una mayor frecuencia en limpieza de las lentes, así como lavarse las manos antes de manipularlas".

Otra dolencia que se multiplica en verano es la sensación de ojo seco. El doctor Llovet explica que "el aire acondicionado de los edificios y de los vehículos y los ventiladores resecan la superficie ocular. Por esta razón, recomendamos el uso de humidificadores y de lubricantes oftalmológicos, que deben ser prescritos por un especialista".