A su llegada el rey emérito se mantuvo en todo momento en un segundo plano dejándole a su hijo el mayor protagonismo durante el saludo a los allí presentes. Como no podía ser de otra forma el rey Felipe destacó el espíritu deportivo del Atlético de Madrid y le deseó la mayor de las suertes en esta nueva etapa que van a comenzar en el nuevo estadio.
De esta forma, la afición del Atlético de Madrid se despide del Vicente Calderón donde tantas emociones, victorias y derrotas han vivido los colchoneros, siempre tan entregados a su equipo.