Con el auge de las redes sociales y el enorme volumen de datos que se mueven a través de ellas, ya sea en forma de archivos fotográficos, vídeos o textos, la Ley de Protección de Datos a menudo se convierte en algo difícil de proteger o controlar y, como consecuencia, expone una vulnerabilidad que pueden explotar aquellos decididos a quebrantarla.
En este caso, la víctima de esta situación ha sido una joven adolescente de Irlanda del Norte, que ha visto como repetidamente aparecía en una página de Facebook su fotografía desnuda. Tanto es así, que lo hizo a lo largo del tiempo entre noviembre de 2014 y enero de 2016, tal y como han expuesto los abogados de la menor, que ha decidido demandar a la compañía de Mark Zuckerberg, además de al hombre sospechoso de haber publicado la instantánea.
Según éstos últimos, la imagen habría sido obtenida a través de la extorsión y publicada en la Red como venganza, comparándolo con una forma de maltrato infantil.
Más allá, acusan a Facebook de negligencia al tener el poder de bloquear cualquier re-publicación a través de un proceso preciso para identificar la imagen: "Si hubiesen bloqueado todas las publicaciones posteriores de su fotografía desnuda esto no hubiera ocurrido", manifestaron en declaraciones recogidas por Irish Times.
Por todo ello, han requerido una indemnización por dicha negligencia y por el incumplimiento de la Ley de Protección de Datos.
Por su parte, Facebook se defiende afirmando que siempre retiraron la imagen una vez notificada, asegurando que se basaron en una directiva europea y argumentando que provee protección monitorizando una enorme cantidad de material online de lo que es publicado en una página. De este modo, hacen hincapié en que la red social siempre da respuesta a cualquier violación o brecha de seguridad que le sea reportada.