El Gobierno dará 66 millones de euros a agencias que trabajan contra la hambruna en el Cuerno de Africa

El Gobierno de España aprobará este viernes distribuir 66 millones de euros entre media docena de agencias y organizaciones que están haciendo frente a la emergencia que atraviesa el Cuerno de Africa por la violencia en Somalia y que se ha agudizado con la sequía, ha anunciado el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación.

El Consejo de Ministros dará luz verde a seis contribuciones voluntarias de España a agencias y organizaciones internacionales por un valor total de 66 millones de euros. Serán los receptores los que decidan cómo usan esas ayudas, que podrán destinar en su totalidad o en parte a la crisis humanitaria en el Cuerno de Africa.

La partida más elevada, de 22 millones de euros, la recibirá Unicef, que ha lanzado una campaña de vacunación infantil en el mayor campo de refugiados del mundo, el de Dadaab en Kenia, saturado por más de 400.000 desplazados somalíes.

El Programa Mundial de Alimentos, que ha abierto un puente aéreo para llevar provisiones a la zona, recibirá de España 17 millones de euros, mientras que otros 15 millones irán a parar al Fondo central de respuesta a emergencias de Naciones Unidas.

Cruz Roja y la agencia de la ONU para los refugiados (Acnur) obtendrán cuatro millones de euros cada una, mientras que otros 2,9 millones serán para el Servicio Global de Reducción de Desastres.

Al margen de estos 66 millones, España va a destinar a lo largo de este año 25 millones de euros a la emergencia en el Cuerno de Africa. Desde enero hasta la fecha, el Gobierno ya ha desembolsado 15 millones, recuerda el departamento que dirige Trinidad Jiménez.

Este dinero se canaliza a través de las agencias humanitarias de la ONU --fundamentalmente el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y ACNUR, pero también la FAO y UNICEF--.

Dentro de esta contribución de España se incluye la financiación de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) en Mogadiscio, la activación de un convenio con Médicos sin Fronteras para atender a los refugiados en la frontera de Etiopía con Somalia y la puesta en marcha de un programa junto con EEUU, Brasil y el PMA para el envío de 9.000 toneladas de cereales y legumbres a Somalia.