La lucha contra las llamas continúa. Los accesos al Parque Nacional de Garajonay siguen cortados. Es la Guardia Civil la que se está encargando de impedir la entrada a la zona. Ni turistas ni vecinos pueden pasar. Sólo algunos afortunados han podido acceder a sus viviendas para recoger algunas cosas y alimentar a los animales. Otros confían en volver pronto a su casa, o que les ofrezcan una alternativa, porque desde el viernes están sin medicamentos. Los gomeros están desolados, viendo cómo arden bosques que se han tardado años en formar. Ahora sólo les queda la tristeza y esperar para ver cómo evoluciona el fuego y saber si regresarán pronto a su hogar.