Aunque todavía no se conocen mayores detalles, el Departamento de Salud de Texas informó que la nueva víctima mortal fue una mujer que sufría enfermedades crónicas y que vivía en Cameron, condado fronterizo con México.
Este es la segunda muerte que se presenta en ese estado y en todo EE.UU., pero es la primera de un estadounidense, ya que el primer caso fatal por la gripe A fue el de un bebé mexicano de 23 meses que estaba en Texas donde unos familiares.
Esta noticia se sumó a la confirmación de 403 casos de la enfermedad en 38 estados del país, según las más recientes cifras del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés).
Aunque este balance representa un incremento de 40,9 por ciento en las cifras con respecto a ayer, no significa que necesariamente haya nuevos casos, sino más bien se debe a la actualización de la base de datos a raíz de los resultados de las pruebas que entran desde los laboratorios.
"La verdad es que el brote ha sido mucho menos virulento de lo que nos temíamos en un principio", dijo hoy la secretaria de Salud, Kathleen Sebelius, aunque pidió no bajar la guardia.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, coincidió con Sebelius, al señalar que las consecuencias de la propagación de la gripe A han sido hasta ahora "relativamente leves".
La propagación de este virus "nos recuerda que vivimos en un mundo interconectado, en el que un peligro en un país es un peligro para todos, y se requiere de una actuación colectiva", dijo.
Además, Ban reiteró que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no tiene intención de elevar el nivel de alerta a la fase seis, la más alta de la escala, pero recalcó que hay que mantener la vigilancia porque el virus AH1N1 todavía es un gran desconocido.
Mientras tanto, el ministro guatemalteco de Salud, Celso Cerezo, informó hoy del primer caso confirmado de gripe A en su país. Se trata de una niña de once años recién llegada al país desde México, el principal foco de la enfermedad.
Además de Guatemala, que ya decretó la "alerta naranja", en América se han detectado casos en Estados Unidos, Canadá, Colombia, El Salvador y Costa Rica, pero México sigue siendo de lejos la nación más afectada del mundo, con 29 muertos y 913 enfermos.
Las autoridades mexicanas ahora dirigen gran parte de sus esfuerzos a restablecer la normalidad alterada desde que el 23 de abril se emitiera la alerta sanitaria.
El ministro de Hacienda, Agustín Carstens, anunció un paquete de medidas de apoyo fiscal a las empresas del país por un monto de 17.400 millones de pesos (1.312 millones de dólares) para contrarrestar los efectos negativos de la epidemia en la economía.
Las autoridades calculan que el Producto Interior Bruto (PIB) de México puede contraerse de un 0,3% a un 0,5% adicional debido a la gripe A.
El Gobierno mexicano anunció, además, que el avión que fletó para repatriar desde China a sus nacionales a raíz de la gripe A despegó a las 19.41 GMT de Hong Kong, última etapa de su recorrido tras pasar por Shanghai, Pekín y Cantón.
A falta de confirmación oficial, el número se pasajeros se sitúa en 152, según algunas fuentes a las que tuvo acceso Efe.
En este grupo se encuentra la mayoría de los 45 mexicanos que desde el jueves pasado cumplían una cuarentena ordenada por China.
Al turista mexicano de 25 años que se convirtió en el primer y único caso de gripe A en Hong Kong se le denegó la posibilidad de repatriación, según las autoridades de Hong Kong.
En Norteamérica, Canadá elevó hoy a 165 el número de casos, tras la detección en las últimas horas de 25 infecciones nuevas, y dijeron que el único paciente con síntomas graves se está recuperando.
De acuerdo con los más recientes datos de la OMS, hay 30 muertos (al que habría que añadir el nuevo caso de Texas) y 1.490 personas que padecen la gripe A (que no incluyen las cifras actualizadas de Canadá) en 21 países.
El director general adjunto del organismo, Keiji Fukuda, señaló que la mayoría de enfermos son personas relativamente jóvenes.
La edad media de infectados no llega a la treintena y los científicos de la OMS están investigando el motivo de que sean los jóvenes los más afectados.
La OMS también informó hoy que calcula que el periodo de incubación está "entre un día y una semana" y no dos semanas como se pensaba antes, lo que se acerca "al periodo de incubación de una gripe normal estacional".
El Centro de Prevención y Control de Enfermedades de la Unión Europea advirtió que "no se debe relajar la vigilancia" del virus, pues aunque la mayoría de casos confirmados por ahora en Europa tienen síntomas moderados, su incidencia puede recrudecerse.
"Incluso si concluimos que es una pandemia moderada, no podemos bajar la guardia y relajarnos el próximo otoño, porque las pandemias pueden cambiar muy rápidamente", indicó el director del Programa sobre Gripe del centro con sede en Estocolmo, Angus Nicoll.
La OMS comenzó a enviar 2,4 millones de tratamientos de Tamiflú (uno de los dos fármacos que sirven para curar la gripe A) a 70 naciones, con el fin de adelantarse a una posible pandemia.
Los medicamentos enviados son parte de las reservas de 5 millones de tratamientos de Tamiflú que la empresa suiza Roche donó a la OMS en 2006.