La Guardia Civil recupera en Sevilla una cabeza presuntamente romana desaparecida en Cádiz

  • La cabeza, desaparecida hace años, se encontraba en un domicilio particular

  • Ha sido entregada al Museo Arqueológico de Medina Sidonia, Cádiz

Nuestro hombre perdió la vida, se supone, hace ya muchos siglos, allá por el segundo de nuestra era. Perdió la vida, pero no la cabeza. Su rostro, pelo ensortijado y barba del mismo porte, como mandaban los cánones de la época, quedó reflejada en piedra, en una escultura, presuntamente romana, hallada en la localidad gaditana de Medina Sidonia. Nada extraño, en una ciudad que perteneció al imperio bajo el nombre de `Asido Caesarina Augusta´, y que cuenta con un importante museo arqueológico.

Un mal día, dos mil años después, nuestro hombre, que ya había perdido la vida, perdió también la cabeza. Su efigie se desvaneció de Medina Sidonia, y dado que una escultura no puede moverse, resulta evidente que alguien se la llevó. Lo que no era tan evidente era adonde. Así que, en un lugar desconocido, estuvo nuestro hombre años y años.

La historia, sin embargo, tiene un fin. 13 de julio, agentes de la Guardia Civil pertenecientes al equipo de delitos contra el patrimonio de la comandancia de Cádiz, que intentan localizar y recuperar unas piezas arquitectónicas, reciben el aviso de que un vecino de una localidad de la provincia de Sevilla puede tener en su poder una cabeza romana.

Y allá que van los agentes a hablar con el vecino, y a explicarle la legislación aplicable, ante lo cual decide colaborar, y manifestar su deseo de hacer entrega voluntariamente de la tan traída y llevada cabeza al Museo Arqueológico Municipal de Medina Sidonia.

Con todas las precauciones para su traslado, la pieza viajó hace unos días hacia su destino. Allí la recibió el alcalde. Ahora, por fin, recuperada su cabeza, nuestro hombre está ya en el Museo Arqueológico de Medina Sidonia, descansando en medio de objetos que para nosotros son pasado, y para él presuntamente cotidianos.

Temas