Aunque los cadáveres fueron encontrados a las 13:0 horas del domingo el suceso no ha trascendido hasta este lunes y la hipótesis que se baraja es que ambos pudieron morir de madrugada.
Un hijo de ambos, un hombre de 25 años que trabajaba con su padre en una empresa de fabricación de neumáticos de la capital burgalesa, avisó a los bomberos, ante la imposibilidad de abrir la puerta del domicilio.
Cuando los bomberos accedieron al interior encontraron al matrimonio ya sin vida, la mujer con varias heridas en el pecho tumbada en el pasillo y el hombre, también con heridas de cuchillo en el pecho, en el salón.
La Policía Nacional considera que el hombre pudo apuñalar a la mujer y después quitarse la vida con el mismo cuchillo. BQM