La gran mayoría de los más de 2.000 inmigrantes ilegales que llegaron durante este fin de semana a la isla italiana de Lampedusa, cerca de Sicilia, partieron en barco desde Libia, mientras que algunos lo hicieron desde el vecino Túnez, según ha informado este martes el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
Según ha explicado el portavoz de la agencia de la ONU, Adrian Edwards, "unos 1.800 partieron desde Janzour, 12 kilómetros al oeste de Trípoli, donde habían esperado durante una semana a que se calmara el estado del mar". De ellos, ha precisado, unos 200 eran mujeres y había también 30 niños.
Las conversaciones mantenidas por personal de ACNUR con los recién llegados han permitido constatar que "la gente sigue abandonando Libia por varios motivos". Así, un grupo de sudaneses relató que habían sido detenidos en Trípoli y obligados a subirse a un barco, mientras que otros partieron hacia Europa en busca de oportunidades tras perder su trabajo en Libia.
Según ACNUR, de las 52.000 personas que han llegado a Italia este año tras la estela de la 'Primavera árabe' en el norte de Africa, 27.000 partieron de Libia y el resto de Túnez. En el caso de los procedentes de Túnez, todos eran tunecinos, mientras que de los que partieron de Libia sólo 134 tenían esta nacionalidad, según Edwards.
Por otra parte, el portavoz de la agencia de la ONU ha indicado que en lo que va de año "más de 1.500 personas han perdido sus vidas intentando llegar a las costas italianas, a menudo por viajar en barcos desfasados y por la falta de una tripulación cualificada a bordo".
Según informan los medios italianos, durante el fin de semana han llegado hasta Lampedusa, principal punto de entrada de inmigrantes en Italia, más de 2.000 clandestinos a bordo de distintas embarcaciones, en algunos casos con hasta 400 personas a bordo. Esta misma mañana había llegado un nuevo barco con 280 personas a bordo, entre ellas 20 mujeres y un niño.