La Federación de Jóvenes Investigadores/Precarios (FJI) ha denunciado problemas y retrasos en la gestión de ayudas postdoctorales convocadas por el Ministerio de Educación y que, según han señalado, mantiene "a más de mil jóvenes científicos españoles en una situación "insostenible" al no poder planificar sus tiempos de trabajo y sufriendo largos periodos de espera que les llevan a paralizar e interrumpir sus investigaciones.
Así, según ha explicado FJI, en el desarrollo de una carrera investigadora resulta "de vital importancia para el futuro del investigador" el paso de la fase predoctoral a la postdoctoral. Sin embargo, la FJI apunta que "el primer obstáculo que se encuentran los recién doctorados en este país son las trabas burocráticas".
En este sentido, indican que en programas como el de estancias de movilidad postdoctoral en centros extranjeros o el de Movilidad de Recursos Humanos de Investigación "no se han cumplido los plazos que establecen las convocatorias desde el año 2005".
Además, indican que también existen negligencias a la hora de "olvidar candidatos seleccionados en las resoluciones del Boletín Oficial del Estado (BOE), en las fechas de concesión o dejando sin adjudicar más del 10 por ciento de los contratos presupuestados".
Por ello desde la federación han pedido al Ministerio de Educación que cumpla sus compromisos y plazos, en lugar de "entorpecer el tránsito a esta etapa fundamental" y han mostrado su desacuerdo "con el incumplimiento del compromiso del gobierno a no recortar en la inversión en I+D".
"FJI reclama que se tomen medidas de carácter urgente e inmediato para que tales deficiencias de gestión no se vuelvan a repetir, como viene sucediendo últimamente convocatoria tras convocatoria. Además, se exige una mayor transparencia en la evaluación por parte de la Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva (ANEP) de la propuesta, así como de los criterios adoptados por la comisión ministerial en la que recae la decisión final de concesión", ha explicado la FJI.
Del mismo modo, para facilitarle la labor al Ministerio de Educación, ha elaborado un informe en el que se han detectado cuáles son los principales problemas producidos en la gestión de este programa, y en el que se ofrecen posibles soluciones.
Para la FJI, los retrasos, incumplimientos y negligencias además de constituir un serio obstáculo a la transición de la etapa predoctoral a la etapa postdoctoral se traducen en una imagen muy negativa del sistema científico del país en el extranjero.
"A ello hay que sumar que este programa ha sido el único que ha experimentado un recorte brutal, llegando a las cien plazas en la presente convocatoria (una reducción de casi un 30%) por lo que hay sólo 250 contratos postdoctorales para cerca de 1.500 investigadores solicitantes, que soportan lo indecible para tener la posibilidad de continuar con su trabajo", concluye la FJI.