La sección segunda de la Audiencia de Granada acoge desde este lunes 24 de junio el juicio contra el coronel de la Guardia Civil que presuntamente participó en la introducción de toneladas de hachís en el año 2006. El agente recibió presuntamente dinero a cambio de impedir que los alijos fueran interceptados por la benemérita para su posterior venta-
La Fiscalía de Granada solicita para el hombre nueve años y tres meses de prisión por supuestos delitos de cohecho cometido por funcionario público y contra la salud pública, así como una multa de 6,3 millones de euros. Para los otros dos narcos, declarados en rebeldía, pide cinco años y tres meses de prisión por supuestos delitos de cohecho cometido por particulares y contra la salud pública, aplicando el atenuante de confesión.
En el momento de los hechos, el acusado era comandante de la Guardia Civil de Granada con mando en todas las operaciones antidroga de esta provincia. El hombre se aprovechó de esta situación para acodar la entrada de dos alijos de hachís por las playas de Motril, en Granada.
Según la fiscalía, el agente se comprometió a impedir que la droga fuera interceptada por la Guardia Civil y a asegurar su entrada para su posterior venta. Todo ella a cambio de 120.000 euros. A esto se sumaría una tercera entrada de droga, interceptada por la benemérita, para justificar las otras.
Los acusados colaboraron hasta mayo de 2006, a pesar de que el alto mando se encontraba “acuciado por las sospechas de los agentes a sus órdenes”, afirma el fiscal. La Asociación Unificada de Guardias civiles, que está personada como acusación particular, solicita para él 18 años de prisión