La fuente dijo que la pareja fue puesta en libertad tras negociar las autoridades locales con los secuestradores, miembros de la tribu Al Faray, pero no ofreció más detalles sobre si se cumplieron o no alguna de las reivindicaciones de éstos.
El matrimonio neerlandés fue capturado en un barrio al sur de la capital y fueron trasladados a la zona montañosa de Bani Debiyán, 80 kilómetros al oeste.
Los rehenes eran un experto holandés que trabaja en un proyecto hídrico gubernamental en el sur del país y su esposa.
La pareja, que se encuentra en buen estado, llegará hoy a la capital desde el lugar en el que permanecía retenida.
El secuestro de extranjeros es un fenómeno habitual desde hace unos años en Yemen, con objeto de presionar a las autoridades para que cumplan determinadas demandas de las comunidades tribales.