La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades Recreativas Musicales (Fecasarm) se personó este jueves como acusación popular en los dos procedimientos judiciales abiertos ante los juzgados de instrucción número 2 y 3 de Blanes por los altercados de la semana pasada en Lloret de Mar (Girona).
La ciudad vivió la madrugada del 10 de agosto una batalla campal entre turistas y Mossos d'Esquadra ante la discoteca Colossos, que se saldó con 20 detenidos por desórdenes --de entre 17 y 30 años y todos extranjeros-- y 22 heridos, además de destrozos en el mobiliario urbano.
En un comunicado, la Fecasarm ha reclamado que se imponga a los vándalos la máxima pena prevista por el Código Penal, también para disuadir a otras personas que quieran viajar a Lloret de Mar "pensando que se puede hacer lo que se quiera con total impunidad".
De aceptarse su comparecencia como acusación popular, la patronal baraja pedir al juez la declaración de los responsables de algunos turoperadores y agencias intermediarias que hayan contribuido a los disturbios con su publicidad engañosa.
Así, ha subrayado la necesidad de contrarrestar los mensajes de algunos turoperadores "para atraer turistas a cualquier precio", al considerar que su conducta desprestigia de forma irreparable la imagen de la ciudad y del sector del ocio nocturno.