Una madre golpea a los maestros que impidieron a su hija transgénero de seis años abrazar a otros alumnos

Informativos Telecinco 19/10/2017 00:23

Emma Smith es una niña transgénero de seis años que vive en Carolina del Norte, Estados Unidos, apoyada por sus padres, Amy y Kevin. Pero ese apoyo parece que no lo tiene en la escuela, ya que allí, sus profesores la llaman por el nombre masculino que tenía anteriormente: Colton.

"La forma en que Emma ha sido tratada por sus maestros les ha enseñado al resto de sus compañeros que no respetar quién es ella está bien. Ha sido horrible”, ha explicado Amy, la madre de la pequeña de seis años, a Daily Mail.

Además, sobre alguno de los momentos vividos en clase por Emma, la progenitora ha asegurado que "al principio le dijeron que tendría que usar el baño de los niños, pero como estaba vestida de niña le preocupaba que le pegaran o le hicieran bromas, así que un par de veces se orinó encima”.

Tan mal fue tratada, que le dijeron que no podía abrazar a nadie. Pero su madre, en un intento de concienciar a la pequeña, le explicó que ella podía abrazar a todas las personas siempre que estas le diesen su consentimiento. Y, sobre todo, que los adultos no siempre tienen la razón.

Fue cuando Emma tenía tres años, cuando Amy se comenzó a percatar de que el que había sido su hijo se sentía mujer. Así, relata que la pequeña gritaba y lloraba cuando se le vestía con ropa de niño: "Emma estaría muy angustiada si la vistiéramos con ropa de niño. Pude ver que estaba pasando por una lucha interna”.

Y el cambio fue gradual, al principio permitía que su hijo, por aquel entonces, vistiese con ropa de niña en casa, “pero con ropa de niño si salíamos, para evitar comentarios desagradables y millones de preguntas”.

Pero tras acompañar a su hija a un terapeuta, cuando tenía cinco años, se dieron cuenta de que ella era una niña, aunque hubiese nacido biológicamente como un niño. “Esta no es una fase pasajera”, ha dicho Amy. Todo ello tras la confirmación por parte del terapeuta de que su hija era transgénero.

"Fue un gran alivio saber qué estaba sucediendo y aclarar que habíamos hecho lo correcto”, ha explicado la madre sobre el momento en el que se enteraron de la noticia. Y aunque ella sí lo entendió, su marido se mostró más reticente: "Al principio, Kevin tuvo dificultades, mientras yo entré en el modo mamá oso y solo quería proteger a Emma”. Pero ahora todo ha cambiado y el padre ahora “no entiende qué pudo ver de extraño”.

Tan claro lo tenía Emma, que su madre ha asegurado que “nunca estaba confundida de quién era ella, éramos nosotros los que estábamos confundidos”. Y tras la visita al terapeuta, Amy pidió a toda la gente que dejaran de usar su nombre anterior.

Pero los problemas en la escuela ya están olvidados, ya que tras cambiar de centro en agosto de 2017, el personal docente sí entiende qué es y no tiene problemas en tratarla como a una niña más.

Ahora, Amy y Kevin han comenzado a ahorrar para que en un futuro Emma pueda pagar su transición a mujer. Eso sí, los padres explican que hará ese cambio si es lo que ella quiere. Aun así, incluso han abierto una página para recaudar fondos, ya que la operación no está cubierta por el seguro de salud que tienen contratado.