Mal amor de madre, un asesinato de 1933

INFORMATIVOS TELECINCO 03/05/2009 07:44

La mañana del 9 de Junio de 1933 Aurora, la madre de Hildegart Rodriguez, la niña superdotada más famosa de la Historia de España, cogió una pistola se acercó a la habitación de su hija y le disparo tres tiros en la cabeza y uno en el corazón. Luego se fue a pasear a los perros. Horas más tarde, al entregarse a la Policía en una comisaría de Madrid, tan sólo dijo que había matado a su hija "porque se había apartado de la misión que le había encomendado".

Fue el suceso más escandaloso de la convulsa República ya que Hildegart había alcanzado una enorme popularidad no sólo entre las publicaciones de la época y el público que las seguía , sino entre los intelectuales que como Marañón o el escritor británico HG Wells admiraban el trabajo y la dedicación de esta joven prodigio.

Hildegart o Hildegarda había nacido el 9 de Diciembre de 1914 en Madrid hija de Aurora Rodriguez, una socialista gallega que concibió a su hija tras seleccionar al padre por su intelecto y apariencia física. La niña nunca tuvo contacto con su progenitor y desde su infancia destacó por su precocidad. A los ocho años ya hablaba seis lenguas, a los catorce ya daba conferencias sobre sociología y política y era una figura reconocida de la izquierda española, expulsada del partido socialista en 1932 por su actitud crítica.

Sexualidad, amor y libertad

Siempre acompañada de su madre, Hildegart finalizó la carrera de Derecho a los 17 años y comenzó la de Medicina, mientras daba conferencias y escribía libros sobre la juventud y la revolución sexual. Teniendo en cuenta el índice de analfabetismo de la época su libro "La rebeldía sexual de la juventud" fue un gran best seller ya que llegó a vender sólo en Madrid en la primera semana que estuvo a la venta cerca de 8000 ejemplares.

Aunque Hildegart hablaba y escribía sobre la sexualidad, el amor y la libertad, parece que no disfrutó de ninguna de las tres cosas. Aurora, esa madre omnipresente, la custodiaba día y noche.

Aquel 9 de Junio, en un estado paranoico que ha sido estudiado en libros, películas y tratados, decidió acabar con la vida de su creación, su única hija que acababa de cumplir 18 años. Nunca añadió ni una sola palabra a lo que dijo a la policia. Nunca, ni en los dieciséis años que pasó en la cárcel , ni en la década que luego pasó en un psiquiatrico.