La dramática guardia de un médico gallego: comunica a una mujer contagiada que su marido ha muerto por covid

  • El hombre de 70 años sufrió una parada cardiorrespiratoria

  • Después de 45 minutos de reanimación falleció "sin poder hacer nada"

  • Él tuvo que llamar a su esposa, infectada y confinada, a las 3.30, para decírselo

El médico Ignacio Ramil, internista en un hospital de A Coruña y divulgador en redes sociales de los efectos de la pandemia, ha contado una experiencia vivida en una de sus últimas guardias cuando tuvo que avisar a una mujer de que su marido había fallecido, tras haber contraído ambos la covid-19, con el ingreso de él en un centro y el caso de ella en seguimiento domiciliario.

El hombre, de 70 años, explica Ramil en su cuenta oficial de Twitter, sufrió una parada cardiorrespiratoria, un infarto no esperado, a las dos de la madrugada y después de cuarenta y cinco minutos de reanimación falleció "sin poder hacer nada".

Entonces él tuvo que llamar a su esposa, infectada y confinada, a las 3.30, para decírselo. "Imaginadlo", pide. Ignacio Ramil cree que el próximo 17, cuando se cumplen las tres semanas acordadas para las duras restricciones, "salvo mejoría muy marcada" se impone la "prudencia".

O se opta por una estrategia de cero covid, con "mucho sacrificio y esfuerzo de todos", o se abre tibiamente la mano, opina.

Viendo el "sacrificio social, sanitario" y el coste en vidas "que supuso la Navidad", ve más factible un escenario en el que se mantengan límite perimetral, núcleo de convivencia, y se permita a la hostelería las terrazas con mesas ocupadas por personas que habiten bajo el mismo techo y aforo del 50%.

También apertura de comercios y centros como antes de la última limitación, fomento del teletrabajo, y educación presencial con ventilación y mascarillas.