Muere un niño de cinco años electrodependiente tras un corte de luz de 14 horas

Informativos Telecinco 25/06/2018 12:59

Valentino Ladislao, de cinco años, sufrió un accidente con dos años, cuando su hermana rompió una ventana y uno de los cristales se le incrustó en el corazón. Como consecuencia, se le obstruyó un ventrículo y esto le provocó una parálisis cerebral. Le realizaron una traqueotomía y desde entonces es electrodependiente y utiliza un concentrador de oxígeno.

El lunes pasado cortaron la electricidad en su domicilio por una “interrupción programada en la zona” que se alargó más de lo debido. El pequeño falleció tras estar 14 horas sin suministro.

“A las siete de la mañana del lunes se fue la luz. Yo me acerqué a una cuadrilla que se encontraba en la esquina de mi casa. Me dijeron que estaban haciendo unos arreglos y que iba a estar cortado hasta las siete. Les dije que tenía un hijo electrodependiente que necesitaba electricidad”, explica Mariana Medina, la madre del niño, en declaraciones recogidas por Clarín.

La familia tiene una deuda de 1.900 euros (unos 60.000 pesos) con la empresa de la electricidad, por lo que no es la primera vez que sufren un corte de luz. Sin embargo, éste ha sido el más crítico. “No era la primera vez que nos cortaban la luz por muchas horas. En las otras ocasiones, Valentino había aguantado. Esta vez, no lo logró”, indica Medina.

La madre del pequeño llamó varias veces a la compañía para que solucionaran el corte de electricidad. “Primero con mi número de cliente, pero como debía 1.900 euros, me contestaban que no me podían dar información sobre el corte porque era deudora. Yo avisé que tenía un nene electrodependiente y que sin luz se podía morir. También llamé con el número de mi abuela, de mi tío y hasta de un vecino, pero no logré nada”, relata.

Se negó a llevar a su hijo al hospital, ya que había un brote de bronquiolitis y no quería que el niño se contagiara. “Los médicos me decían que había que llevarlo sólo en situaciones extremas para evitar las infecciones intrahospitalarias. Tenía un tubo de oxígeno, que no es lo mismo que el concentrador, pero me imaginé que con eso iba a superar las horas sin luz”, lamenta Medina.

En contradicción a lo previamente acordado, a las 19.00 horas seguían sin electricidad por lo que el padre del niño intentó arreglar un generador que le donaron hace un tiempo, pero que había dejado de funcionar.

“Alrededor de las 20.40 horas, pudimos prenderlo y ahí lo aspiré. Pero fue tarde. A las 21.00 dejó de respirar”, relata su madre que añade que le llevaron de inmediato al hospital donde solo pudieron certificar su muerte.

“El informe preliminar de la autopsia dice que el fallecimiento se produjo por un paro cardiorrespiratorio. El sábado me entregaron el cuerpo y el domingo lo enteramos”, cuenta Medina.

Su padre indica que están esperando el resultado final de la autopsia para “iniciar acciones legales” y que se van a “manifestar frente a la sede central de la empresa para que no haya más Valentinos”.

Por su parte, la empresa en cuestión ha asegurado que no tenían registro de que allí residiera un niño electrodependiente y han aclarado que “no se interrumpió el suministro de la energía en el domicilio por la deuda”, sino que se trató de un “corte programado en la zona”. “No sabíamos que en esa casa vivía una persona electrodependiente ya que esa situación no había sido registrada”, han declarado portavoces de la empresa.