Zara Ahmed, de 18 años, escapó ilesa del terrible atentado terrorista que se produjo en el concierto de Ariana Grande el pasado 22 de mayo que dejó 22 fallecidos y cientos de heridos. Desafortunadamente y ajeno a esta masacre, Zara se ha desmayado en los pasillos de su universidad y ha fallecido. La joven sufría de diabetes y se piensa que pudo ser la principal causa de su muerte.
En un comunicado, su familia le rindió homenaje y dijo: "Todos echaremos de menos a esa chica brillante, descarada, burbujeante y graciosa. Era tan hermosa por dentro como por fuera".
Zara asistió a la universidad de Liverpool John Moore donde estudiaba ciencia forense. Al parecer no llevaba mucho tiempo en la universidad pero ya había destacado por su entusiasmo y emoción por los estudios.
La familia agregó: "Zara trabajó duro, pero también se lo pasó muy bien y disfrutó al máximo, abrazó la vida al 100%. No hay duda de que el fallecimiento de Zara ha dejado un vacío en nuestros corazones y en los de sus amigos que nunca se podrá llenar.”
Los padres de la joven hicieron además referencia a la terrible experiencia que vivió su hija durante el concierto que dio una de las estrellas del pop internacional, Ariana Grande: "Era su cantante favorita y una noche de diversión con amigos se convirtió en una tragedia. Zara se vio profundamente afectada por ese evento. Ella siempre estaba sonriendo y nada la hacía más feliz que ponerse a cantar las canciones de su artista preferida”.