El consistorio de la capital catalana ha dado hoy estas cifras en medio de la "tormenta" social y política que se ha generado en la ciudad en las últimas semanas por las denuncias públicas que diferentes asociaciones vecinales, medios de comunicación, partidos políticos y otras entidades han formulado por el problema creciente de la prostitución callejera, especialmente en el entorno de Las Ramblas.En el primer año de aplicación de la normativa de civismo, se tramitaron 5.080 denuncias por ofrecer o demandar servicios sexuales en determinadas áreas, una actividad que esta penada con hasta 750 euros de multa, han informado a Efe fuentes del consistorio.
En 2007, las denuncias -de las que el ayuntamiento no ha especificado cuántas corresponden a prostitutas y cuántas a clientes- bajaron sustancialmente hasta las 2.919, y en 2006, continuaron su descenso hasta las 2.058.
En lo que va de este año (hasta finales del mes de agosto), las denuncias por esta actividad han rondado las 1.500.