El sondeo se efectuó los pasados días 14 y 15 entre 2.000 personas de 44 de las 83 regiones y repúblicas que integran la Federación de Rusia.
También ha disminuido el nivel de confianza en el ex presidente y actual primer ministro, Vladímir Putin: del 66 al 63 por ciento.
Según el presidente de la FOM, Alexadr Oslón, aún es prematuro hablar de tendencias, pero lo que es evidente es que la crisis comienza a pasar factura.
"La estabilidad se acabó; tampoco habrá estabilidad en los niveles de popularidad de los partidos y los líderes", advirtió Oslón.
La oposición considera que los ciudadanos están más receptivos a las convocatorias de mítines de protesta.
Si el 31 de enero a una manifestación contra el aumento de las tarifas en Yekaterimburgo, en los Urales, acudieron 2.000 personas, el sábado pasado un protesta similar congregó a 3.000 manifestantes, dijo a "Védomosti" Serguéi Serioguin, dirigente del Partido Comunista.