Así, el Pontífice se ha dirigido a los jóvenes procedentes de Italia y del resto del mundo que caminaron esa noche 28 kilómetros rezando el Rosario y cantando juntos antes de la Misa celebrada por el Prefecto de la Congregación para los Obispos, el cardenal Marc Oullet, con motivo del inicio de la XXXV peregrinación a los pies de Macerata-Loreto promovida por Comunión y Liberación.
Durante su llamada, el Papa Francisco ha apuntado que "toda la vida es una peregrinación" y ha agregado que "lo importante es el encuentro con Jesús en este camino de la vida" por lo que ha invitado a dejarse "guiar por Jesús".
"Muchas veces para nosotros la fe se presupone en la vida: decimos 'yo creo en Dios', está bien. Pero ¿cómo vives esto en el camino de la vida?. Es necesario que la fe se convierta en una experiencia presente", ha insistido el Papa.
Además, el Pontífice ha indicado que cuando se encuentra a Jesús "sorprende" por lo que ha invitado a estar "abiertos a las sorpresas de Dios" y ha precisado que incluso el evento de esa noche que cada año crece, es una sorpresa "es la señal de que nada es imposible para Dios" porque ha explicado que en 1978 eran 300 y ahora son 90.000.
Por otro lado, el Papa ha animado a repetir el sí a pesar del cansancio y a "reconocer" en las llagas de Jesús del "cuerpo y de su espíritu a la humanidad que necesita la humanidad de Cristo, la única que puede realmente saciar el deseo del hombre".
Finalmente, Francisco ha recordado a los jóvenes la importancia de continuar hacia delante con esperanza. "Por favor --ha precisado-- no os dejéis robar la esperanza; es el Señor quien os la da".