El detenido, que ha llegado en un coche policial escoltado por varios agentes policiales, tenía una expresión sonriente, e iba esposado y con la cara al descubierto.
En las inmediaciones de los Juzgados de Palma había una destacada presencia policial y de periodistas que esperaban su llegada, donde también son numerosos los ciudadanos que se han acercado hasta el lugar.