Es el final de una persecución de película en Sevilla. Todo empezaba en las tres mil viviendas. La policía local daba el alto a un coche, y sus ocupantes no dudan en huir. Empieza una persecución, desde este barrio sevillano. El coche con los jóvenes sale a al S-30, a la A-92, más de 50 kilómetros de carrera. Circulan a más de 180 kilómetros por hora. De hecho, caso provocan varios atropellos y accidentes.
A la persecución se van sumando coches de la policía local y de la Guardia Civil. Hasta que los perseguidos se meten en un olivar en Paradas. Aquí detienen a uno de ellos. Los otros tres chicos consiguen huir a pie. Aunque poco después se les detiene en un bar. Uno de ellos de 20 años tiene más de 25 denuncias y una orden de busca y captura por disparar al coche de su ex pareja, según ha avanzado en redes sociales el perfil de Emergencias Sevilla.
Los cuatro detenidos se han internado en la localidad de Paradas para tratar de burlar a los agentes que les seguía los talones. En su alocada huida estuvieron a punto de atropellar a dos mujeres que cruzaban la calle. Se han metido en un camino de servicio donde han abandonado el vehículo para salir corriendo a pie por un olivar. Uno de ellos ha sido alcanzado por los policías a escasos metros; mientras que los otros tres han conseguido refugiarse en un bar de la localidad, de nombre Poleo, donde finalmente han sido arrestados.
Una vez finalizadas las diligencias de Policía Local, el detenido ha sido puesto a disposición de Guardia Civil que continuará las diligencias por los hechos que se le imputan. Los tres detenidos ocupantes del vehículo fueron puestos en libertad, siendo entregados los menores a sus padres a quienes se le informa del contenido de estas actuaciones.