Según los creadores del estudio, Barcelona ha caído en todos los aspectos que se miden para realizar el informe, es decir, el PIB, la población o el nivel de familiaridad. En concreto, se valoran atributos como la economía avanzada, el ambiente atractivo o si hay un gobierno efectivo, tal y como informa Europa Press.
Por su parte, la capital de España ha ganado dos posiciones con respecto al informe del año 2017, pasando del puesto 21 al 19. Según los creadores del ranking, la subida se debe a que la percepción de Madrid está "claramente vinculada" a la que hay sobre el país. Su calificación, en cambio, ha descendido desde los 77 puntos a los 76,1. Aun así, Barcelona continúa siendo la primera ciudad española en la lista.
La inestabilidad política pasa factura
Según ha declarado el director general de Reputation Institut, Enrique Johnson, el procés a la posición que la ciudad ostentaba en el ranking. A ello hay que añadir, además, los atentados terroristas. "Los atentados del año pasado en Barcelona y Cambrils, así como la inestabilidad política, han pasado factura a la ciudad", ha afirmado.
Especialmente importante es la caída de Barcelona en el apartado de "calidad institucional". En él, desciende un total de 4,5 puntos. Además, hay que destacar que el estudio de la reputación de una ciudad se basa, principalmente, en la existencia de un gobierno eficaz, según el 38% de los encuestados.
Tokio, líder en reputación
A la cabeza del ranking se sitúa la ciudad de Tokio, con un total de 81,8 puntos. Por el contrario, la que menos reputación tiene es Moscú, con 51,3 puntos. Los diez primeros puestos los ocupan, por orden, Sídney, Copenhague, Viena, Estocolmo, Venecia, Roma, Zúrich, Múnich y Montreal.