Así, advierte del riesgo de inundaciones en las cuencas hidrográficas del norte peninsular debido a la persistencia de lluvias en zonas del norte peninsular, junto con el estado de saturación del suelo, la falta de vegetación y llenado de los embalses. el riesgo de desbordamiento afecta a los ríos de las cuencas del Ebro, Cantábrico, Duero e internas vascas.
La nieve afectará a "numerosas" zonas de la Península, incluida la sierra de Madrid, así como el área metropolitana y la zona del Henares. Además, la acumulación de nieve y la subida de las temperaturas en las horas centrales del días, pueden provocar aludes en el Pirineo, por lo que señala la importancia de escuchar los boletines diarios sobre el riesgo de avalancha que emiten las estaciones de esquí y no salir de las zonas controladas.
Ante esta situación, insta a atender las normas preventivas que pueda establecer cada comunidad autónoma y extremar las precauciones, así como mantenerse informado en todo momento sobre la posible evolución de los cambios meteorológicos.
En concreto, avisa de que durante la tarde de este lunes puede nevar en zonas altas de toda la Península, especialmente, en Granada, cordillera Cantábrica, Ibérica y Sistema Central, así como en la Sierra de Madrid, el área metropolitana de la capital y la zona del Henares, donde se pueden acumular 2 centímetros de espesor de nieve.
Mientras, el temporal marítimo afectará, aunque con menor intensidad que en días pasados, a las costas de Almería, Granada, Asturias, Cantabria, La Coruña y Pontevedra, con olas de 4 a 5 metros de altura.
RECOMENDACIONES
Ante esta situación, la Dirección General de Protección Civil y Emergencia destaca que estar informado es la medida de prevención más eficaz e insiste en la necesidad de tomar medidas de autoprotección y seguir las recomendaciones de las autoridades y las normas de prevención de las comunidades autónomas, que pueden adoptar algunas medidas puntuales.
En concreto, para hacer frente al riesgo de inundaciones, aconseja mantenerse permanentemente informado a través de la radio y otros medios de comunicación, de las predicciones meteorológicas y del estado de la situación y no conducir por áreas inundadas y si se ve rodeado por una corriente de agua, abandonar el vehículo y buscar un terreno más alto.
Además, apunta que conviene circular, preferentemente por carreteras principales y autopistas; alejarse de vías y torrentes y no tratar de atravesar a pie vados inundados o corrientes de agua.
En caso de tener que evacuar el domicilio, recomienda trasladar los artículos esenciales a los pisos más altos, cerrar la toma principal de electricidad y gas y seguir las instrucciones de las autoridades.
Ante la crecida de los ríos, recuerda a los ciudadanos que se mantengan permanentemente informados por la radio u otros medios de comunicación sobre las predicciones meteorológicas y el estado de la situación.
Respecto al riesgo de aludes, recuerda que favorecen las avalanchas tanto las grandes nevadas como un aumento brusco de la temperatura e insiste en que si va esquiando y nota que se hacen grietas largas según avanza con la tabla, entonces "el riesgo es muy alto".
Llegado el caso, explica que se debe realizar la primera parte del descenso con giros amplios y luego ir dirigiéndose progresivamente hacia un lateral, porque si se desprenden placas, el riesgo de que le alcancen será menor. También aconseja que conviene evitar descender por cañones o depresiones e intente descender por la cima o ruta más elevada. Las zonas con pinos tienen menos riesgo de aludes. También recomienda evitar cortar placas con diagonales muy largas y, si lo ha hecho, evitar descender por debajo de la diagonal que se ha creado.
CONSEJOS EN CARRETERA
Ante la previsión de nevadas, Protección Civil aconseja viajar por carretera "si es imprescindible" y, en ese caso, ir muy atento y tener especial cuidado con las placas de hielo.
Asimismo, recalca que es necesario informarse de la situación meteorológica y el estado de las carreteras, extremar las precauciones, revisar el vehículo y atender las recomendaciones de Tráfico, revisar los neumáticos, el anticongelante y los frenos y tener la precaución de llenar el depósito de gasolina y llevar neumáticos de invierno o cadenas, ropa de abrigo y un teléfono móvil con batería de recambio y/o cargador de automóvil.
En caso de quedar atrapado en la nieve, aconseja permanecer en el coche, con la calefacción puesta, renovando cada cierto tiempo el aire, y vigilar que el tubo de escape no esté obstruido para evitar que los gases penetren en el interior del vehículo.
En caso de quedarse aislado y necesitar ayuda, Protección Civil aconseja no intentar resolver la situación unilateralmente, tratar de informar de este hecho y, salvo que la situación sea insostenible, esperar asistencia.
En caso de tener que realizar un viaje en condiciones adversas para la circulación, como las que suelen producirse en época invernal, es recomendable informarse adecuadamente de las condiciones meteorológicas y de la situación de la ruta elegida. Es imprescindible disponer de cadenas, o de cualquier otro dispositivo antideslizamiento, sobre todo para viajes por zonas montañosas, así como atender en todo momento las instrucciones de los agentes de vigilancia en las carreteras así como de la información de los paneles de mensajes en carretera.
Con esta situación es importante mantener la distancia de seguridad con el vehículo precedente y en presencia de nieve o hielo no adelantar salvo que se trate de vehículos extremadamente lentos y que se disponga de amplio espacio libre al frente. Los conductores de camiones deben evitar adelantamientos en todo caso.
También aconseja hacerse ver mediante el uso correcto del alumbrado y si la lluvia o la niebla reducen la visibilidad es imprescindible encender el alumbrado de cruce y el específico de niebla. Es importante en vía desdoblada, circular por el carril derecho y, si se tiene que detener el vehículo, hacerlo siempre fuera de la calzada o en el arcén.
Finalmente, ante los vientos costeros, Protección Civil pide alejarse de la playa y otros lugares bajos que puedan ser afectados por las elevadas mareas y oleajes que suelen generarse ante la intensidad de vientos fuertes y recuerda que en estas situaciones el mar adquiere condiciones extraordinarias y puede arrastrarle si se encuentra en las proximidades del mar.