La Red Europea contra los Delitos Ambientales aprueba el plan europeo de lucha contra el veneno, de SEO/BirdLife

EUROPA PRESS 16/02/2016 17:28

El proyecto aprobado por la red, una iniciativa coordinada por SEO/BirdLife y la británica RSPB, pretende frenar el uso del veneno, que aún sigue siendo un "serio problema" para conservar la fauna.

El plan propone una serie de actividades que incluye una red de asociaciones europeas de fiscales, jueces, policía (EnvicrimeNet) y cazadores (FACE), además de representantes del Convenio de Especies Migratorias. En su elaboración han participado una veintena de países de la UE.

El coordinador de la ENEC y miembro de SEO/BirdLife David de la Bodega ha lamentado que en la actualidad no existe ningún instrumento que aborde la problemática del uso de veneno de forma global y unitaria para todos los países de la UE y reclama esto porque es necesraio para proteger el patrimonio natural europeo, "especialmente" en el caso de especies migratorias "que no distinguen fronteras".

Para el coordinador de Conservación de SEO/BirdLife, Juan Carlos del Moral advierte de que muchas especies migratorias, como el milano real o el alimoche, están amenazadas por el uso de veneno pero "el problema" es que "no están igualmente protegidas" contra el envenenamiento en todos los territorios por los que discurre su ruta migratoria. "De nada sirve actuar contra el veneno en un país de la UE si el esfuerzo no es el mismo en los países vecinos, donde pueden morir finalmente envenenados", ha reprochado.

La ONG subraya que el uso ilegal de veneno es una de las amenazas directas para especies europeas como el águila imperial ibérica (Aquila adalberti), águila imperial oriental (Aquila heliaca), milano real (Milvus milvus) o el alimoche (Neophron percnopterus). Asimismo, presenta un riesgo para otros animales salvajes, animales domésticos y la salud humana, con consecuencias potencialmente letales.

De la Bodega ha lamentado que, a pesar de ser ilegal, el veneo sigue utilizándose de forma masiva para "eliminar depredadores" y para controlar las plagas agrícolas. Al mismo tiempo, denuncia que el uso de cebos envenenados es una "práctica arraigada" en los campos que supone un "método no selectivo y cruento para la fauna que supone una grave amenaza para la biodiversidad en la UE".