Dos agentes de la Guardia Civil consiguen evitar el choque de la patera que se aproximaba a las rocas en Caños de Meca. La embarcación, con 70 personas a bordo, se dirigía directa hacia la playa de la aceitera. Sin embargo, el fuerte viendo provocaba que la patera se estuviera acercando al arrecife y que estuvieran en gran peligro, pues con marea baja puede hacer trizas la embarcación.
Los guardias estaban patrullando por la zona con una pequeña lacha, cuando vieron a la patera acercarse hacia el peligro, fue entonces cuando intentaron que los inmigrantes mantuvieran la calma y que no saltarán al agua, ya que cualquier movimiento brusco podría hacerlos volcar. Finalmente, la Guardia Civil consiguió acercase y llegar hasta la embarcación para arrancar el motor y girar la nave, evitando así el choque en el mismo lugar dónde hace seis meses murieron alrededor de 20 personas.