Según informa el diario británico Daily Mail, el estudiante español confesó a unos de sus amigos que “vivía con miedo” pocos días antes de su brutal fallecimiento. El joven, de 23 años y natural de Málaga, ha sido encontrado muerto, decapitado, en el apartamento en el que vivía en Bournemouth (Reino Unido).
El amigo, que ha querido mantener su identidad en el anonimato, ha explicado a la policía que Sergio tenía miedo de alguien que conocía, le confesó “que esa persona decía cosas extrañas y le asustaba”.
Sergio, que vivía en Bournemouth desde hacía un año, se trasladó a la ciudad inglesa para estudiar inglés y trabajar. Varios de sus familiares se han viajado a Reino Unido para buscar información sobre lo sucedido y comenzar el proceso de repatriación de su cuerpo.
"Se nos ha dicho muy poco acerca de lo que ha pasado”, afirma en el citado diario uno de los familiares de Sergio, “la familia está destruida, especialmente su madre”.
Un hombre detenido
La policía británica ha detenido a un hombre de 29 años presuntamente relacionado con la muerte del joven español. En el momento del arresto, al parecer, el sospechoso estaba cubierto de sangre.
Los vecinos de Sergio, que vivía en un apartamento encima del bar en el que había trabajado hasta hacía unos meses, han explicado a la policía que escucharon gritos antes de que encontraran el cuerpo del joven.
Los investigadores, además, han encontrado un rastro de sangre en un callejón cercado al edificio donde vivía la víctima.