Sexo oral, VPH y cáncer

Coral Larrosa 03/06/2013 17:59

“Es un virus ubicuo que vive en las mucosas y muy común en gran parte de la población. Se encuentra en el 60-70 por ciento de los hombres y el 25-35 por ciento de las mujeres.”, apunta el doctor Federico Martinón, pediatra y coordinador de la Unidad de Investigación en Vacunas, del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela. “El VPH –continúa el experto- está ligado a la actividad sexual, y origina infecciones de transmisión sexual. El 90 por ciento de las personas las supera sin problema. Pero si quedan latentes, pueden ocasionar distintos tipos de cáncer.”

Las infecciones relacionadas con el sexo oral son la primera causa de cáncer oral en Estados Unidos. Un estudio de la Universidad de Ohio concluía en 2011 que las personas que han practicado sexo oral con más de seis individuos, tienen ocho veces más probabilidades de desarrollar esta enfermedad, que aquellos menos promiscuos. Pero no es cuestión de etiquetas, dice el doctor Martinón. Sin contacto con la zona genital, el riesgo se minimiza. ¿Sólo se contrae el VPH por una felación o un cunnilingus? También puede ocurrir que las manos, que intervienen en el juego sexual, sirvan de transporte del patógeno a la boca. El contacto con genitales es el punto de partida. La incidencia del cáncer orofaríngeo es superior en hombres que en mujeres. En España se diagnostican unos 4.000 casos de este tipo de cáncer de boca y garganta, relacionados con el VPH. Según estudios realizados en cuatro hospitales madrileños en 2012, su pronóstico es mejor que los causados por alcohol y tabaco, porque responden mejor a quimioterapia y radioterapia.

Evitar la infección no es fácil. Olvidar el sexo oral es una decisión personal. El preservativo sólo cubre el pene, no el resto de zona genital masculina donde puede habitar el VPH, pero según los expertos utilizarlo puede reducir el riesgo. La vacunación es la mejor opción frente a los contagios. En España la cobertura de la vacunación no es óptima porque se han levantado falsas alarmas”, señala el doctor Federico Martinón. “se está vacunando al 60 por ciento de las niñas a partir de los 11 años. Pero en Andalucía, por ejemplo, sólo al 40 por ciento. Una oportunidad perdida de combatir contra una forma de cáncer prevenible”.

En opinión del coordinador de la Unidad de Investigación de vacunas, del Instituto de Investigación Sanitaria de Santiago de Compostela, la protección debería plantearse también con la vacunación de los niños, se evitaría que desarrollaran infecciones por VPH en el futuro, o que infectaran a parejas.”. Australia nos lleva delantera. Se hizo la vacunación del 85 por ciento de las mujeres entre 11 y 26 años y, un lustro después, han reducido un 48 por ciento la incidencia de lesiones de alto grado y lesiones cervicales cancerígenas.