Así lo ha detallado a Europa Press la portavoz de Limpieza de FeS-UGT-Madrid, María Jesús Vivar, quien ha expresado su satisfacción por la participación de la plantilla en los paros pese a los servicios mínimos establecidos, que ha tildado de abusivos.
Aparte, Vivar ha remarcado que este lunes se están produciendo contactos entre el Comité de Empresa y los representantes de la empresa adjudicataria del servicio, Clece, de cara a intentar lograr un acuerdo que acabe con el conflicto.
La representante de UGT ha remarcado que la posición de los sindicatos es que la huelga se resuelva sin que haya "más salidas o que se produzcan las menos posible" en el personal destinado a la limpieza, dado que según sus cálculos se ha prescindido ya de más de 40 trabajadores.
Por otro lado, ha manifestado que aún es "pronto" para que se noten los efectos de la huelga de limpieza y por los servicios mínimos establecidos, aunque ha aseverado también que los trabajadores están concienciados en que no haya ningún tipo de carencia en materia de higiene en quirófanos o UCIs.
No obstante, la representante de UGT ha agregado que si se prolonga la huelga la limpieza "no va a ser la misma" en otras dependencias del hospital.
Los sindicatos UGT, CCOO y CGT han convocado una huelga indefinida a partir de este lunes para los trabajadores de limpieza del Hospital Ramón y Cajal en protesta por los planes de reestructuración de Clece y que suponen según sus cálculos la salida de 63 empleados.
Los servicios mínimos fijados para los paros son del 64,42 por ciento durante el turno de mañana (78 empleados), del 77,63 por ciento por la tarde (59 personas) y del 88,89 por ciento en el caso de la noche (8 personas).
Los sindicatos remarcan que el motivo de la huelga es la protesta por los planes de reestructuración de plantilla que piensa acometer Clece y que, según los cálculos del Comité, supondría tener 63 o 64 trabajadores menos para realizar el servicio.
Al respecto, sostienen que la plantilla que fue subrogada por Clece en octubre comprendía unos 380 trabajadores en el caso del hospital Ramón y Cajal y que ahora, según las estimaciones de los sindicatos, rondaría por debajo de los 350 empleados.