Las víctimas de los dogos les trataban como hijos y no les veían peligrosos: "Mis peques ¡Qué guapos!"

Informativos Telecinco 23/11/2018 13:39

Luisa Pozas y Eva González Pozas, las mujeres que han muerto este miércoles tras ser atacadas por sus perros en Colmenar de la Oreja, eran unas amantes de los perros. Madre e hija colgaban en redes sociales fotografías junto a sus mascotas, a quienes trataban como un miembro más de la familia.

Luisa, de 57 años, publicó la última foto de su perro el 6 de octubre. Pero no fue la única dedicatoria al animal, solo unos días antes, la madrileña subió una imagen con "una perrita más en la familia", en la que aparecen la hembra adulta junto a su pequeño cachorro durmiendo en el suelo de su domicilio de Colmenar de Oreja (Madrid), donde ocurrieron los hechos.

En esa misma publicación aparece un comentario de Eva, de 41 años de edad, alabando a la pareja de canes: "Mis peques ¡Qué guapos!". Su hija, por su parte, también compartía con sus seguidores imágenes junto a su perro, un Dogo de Burdeos.

Ambas parecían mantener un fuerte afecto hacia sus perros, a quienes dedicaban comentarios y fotografías.

El Dogo de Burdeos, la raza de perro que las atacó, no está considerada como peligrosa y los expertos consideran que estamos ante una raza que se muestra afectiva, tranquila, equilibrada.