Goossens se encuentra acompañada por su exmarido y por sus dos hijos, Fritz y Jantje Korten, que, tras volar desde Holanda, llegaron al hospital el miércoles, comprobando que, efectivamente, el estado de salud de su madre era "bastante bueno". De hecho, han afirmado que "está feliz, tiene humor, se ríe y quiere volver lo antes posible a Holanda".
Fritz Korten ha señalado a los periodistas que lo ocurrido a su madre "ha sido increíble" y ha calificado como un "milagro" que haya sobrevivido durante 18 días ingiriendo únicamente agua. "Es una mujer muy fuerte e inteligente, y esa inteligencia y su decisión de no separarse del agua es la que le ha permitido sobrevivir sin comida", ha asegurado.
En este sentido, el portavoz de la familia, Antonio Díaz, ha relatado que Mary Anne le explicó que durante los 18 días que permaneció en el fondo del barranco sobrevivió sólo bebiendo agua y resguardándose del frío por las noches "bajo una roca inclinada y tapándose con hierbas que se metía bajo la camiseta".
"Ella sabía que si seguía hacia abajo no había agua, y no quería alejarse del agua, pero tampoco se atrevía a subir más, y por eso lo que hizo fue esperar, esperar y esperar", ha detallado Díaz, quien también ha precisado que la mujer disponía de un silbato que hacía sonar de vez en cuando para intentar ser oída por alguien que pasase por la zona.
Sus familiares han dicho estar "muy felices" de haber hallado a Mary Anne con vida y haber podido reunirse con ella. Además, han agradecido la ayuda prestada "por la gente de Nerja, Frigiliana, España y Holanda" para la localización y el rescate. Sin alejarse del agua