Los problemas comenzaron en la medianoche del domingo, cuando varios estudiantes protestaron por la distribución de comida de mala calidad y señalaron que habían pagado una tasa para poder acudir a la celebración y que estaban siendo estafados con la comida servida.
En ese momento, miembros del comité organizador del banquete, pertenecientes a la BCL atacaron a los estudiantes que mostraron su descontento con armas y bates de béisbol.
Al menos 25 estudiantes resultaron heridos en el ataque a causa de los golpes de cadena, martillo, bates, varas de bambú y machetazos que recibieron por parte varios integrantes de la BCL, que les encerraron en varias habitaciones, según testigos.
En respuesta a los ataques, varios estudiantes asediaron la residencia del vicerrector de la universidad, Muhammed Alamgir, llegando a romper varias ventanas de su vivienda y del edificio administrativo.
En ese momento, la Policía llegó al lugar de los incidentes y disolvió la protesta golpeando a los estudiantes con porras, a lo que éstos respondieron lanzando ladrillos. Finalmente, varios estudiantes atacaron dos vehículos y la caseta del guarda y lanzaron ladrillos contra la vivienda de Alamgir, hiriendo a su mujer y a su hija, así como a cinco profesores y un agente de Policía que intentaron detener las refriegas.
En consecuencias, las autoridades universitarias ordenaron a los estudiantes residentes que abandonaran los dormitorios para evitar mayores incidentes. Tras ello, la Policía se desplegó en el campus de manera visible y se ordenó el cierre total e indefinido de las instalaciones.