Endika Zulueta, abogado de Willy Toledo, detenido ayer en Madrid cerca de su casa por no ir a declarar en dos ocasiones al juzgado a raíz de una denuncia por supuesta vejación de sentimientos religiosos, ha denunciado que no le permiten hablar con su cliente y que éste está privado de libertad de forma "innecesaria".
Zulueta ha hecho estas declaraciones a su llegada al madrileño Teatro del Barrio, donde se celebra una vigilia por la libertad de expresión a la que tenía previsto acudir Willy Toledo antes de su detención y que se ha convertido en un acto de protesta contra la actuación de la Justicia y de la policía.
Antes de entrar al teatro, el abogado ha denunciado que le han prohibido visitar a su cliente en la comisaría donde se encuentra detenido, y ha afirmado que ha tenido conocimiento de que el actor estaba privado de libertad una hora después de que la policía lo detuviera en las inmediaciones de su domicilio madrileño.
Según el letrado, esta prohibición "vulnera la ley de enjuiciamiento criminal" que, ha recordado, establece que los detenidos "tienen derecho a ser asistidos por un abogado en cualquier circunstancia".
Además, ha denunciado que Willy Toledo "lleva privado de libertad más de 20 horas, de forma innecesaria", pues ha dicho que el objetivo de la orden de detención era conseguir que el actor prestase declaración en los juzgados de Plaza de Castilla este jueves, y para eso, ha añadido, "bastaba con haberle detenido dos o tres horas antes".
Según el abogado, Willy Toledo "decidirá si quiere declarar o no" ante el juez en la causa penal que se sigue contra él "por emitir opiniones y críticas en Facebook" supuestamente vejatorias de los sentimientos religiosos.
Entre las personas que se han acercado esta noche a la vigilia del Teatro del Barrio se encontraba el actor Pepe Viyuela, quien ha abogado por "mantener la lucha constante" contra este tipo de actuaciones policiales y judiciales, que ha calificado de "locuras y despropósitos".
Según Viyuela, la detención de Willy Toledo se debe a "una tontería, un delito absurdo", y por ello ha animado a todos a "no perder la esperanza" y a luchar por la libertad de expresión.