Myriam Benedited se niega a dar clase a Virginia

"No pienso volver a darle clase"

Tras el pase de micros del domingo tocaba el turno de las valoraciones a Virginia, que había actuado en segundo lugar, tras Tania. Como acostumbran valora primero Llàcer, luego Manu Guix y antes de Miguel Manzo, que cierra el turno, le toca a Myriam. Después de las valoraciones de los dos primeros, la propia Virginia le da la palabra a Myriam, pero lacoreógrafa dice que ella no tiene nada que decir. Tercia entonces el director para decir que les ha gustado, que ha estado bien, pero entonces Myriam aclara que ella no ha dicho que le parezca bien sino que no dirá nada, ni bueno ni malo.

La concursante se queda intrigada con la situación y espeta un "que raro" con cara de desconcierto. Llàcer la intenta tranquilizar diciéndola que no se preocupe, que en ese momento no pero seguramente luego se lo dirá personalmente, y Myriam aclara: "No, no, si digo que no tengo nada que decir es que no tengo nada que decir, ni ahora ni luego". Y el tema se queda ahí, dejando a todos con la evidente sensación de que tras la decisión de esta profesora no hay nada bueno para Virginia. 1

No nos equivocamos al intuir que una no valoración de un profesor es casi lo más negativo que le puede pasar a un concursante, dado que unos instantes más tarde Myriam le explica su actitud a Llàcer hablándole al oído. Le dice que ella le propone cada semana una coreografía a Virginia y esta hace lo que quiere, que nunca atiende a sus indicaciones y va por libre, a lo que añade: "No pienso volver a darle clase". El director escucha atentamente y apenas habla, pero todos hemos podido enterarnos de las razones de la profesora.

Esta semana Myriam le había propuesto a Virginia que empezase su coreografía agarrándose a una barra en torno a la cual mostrarse sugerente. La concursante parece aceptar de buen grado la actitud con la que enfrentar el tema 'jazzistico' elegido por ella misma pero desprecia la propuesta de la barra. Realmente de todo lo ensayado con Myriam apenas pudimos ver nada en el pase de ayer. Aún así la decisión de la profesora no ha de interpretarse como un castigo a la concursante, sino que es consecuencia de la actitud de esta, y tiene toda la lógica del mundo.

¿Para que perder el tiempo con esta concursante?

Ya esta semana Myriam le preguntaba a Virginia si se sentía más a gusto siguiendo sus indicaciones y memorizando unos pasos, o por el contrario pensaba que le podía quedar algo mejor haciendo lo que le saliera a ella en el momento, sin tener que estar pendiente de la coreografía. La concursante le responde que prefiere improvisar, y entonces Myriam le responde: "Pues haz eso". La decisión que ayer le transmitía ésta a Llàcer implica respetar la decisión de Virginia, a la se ha encargado de procurar lo mejor para ella, pero sin seguir perdiendo el tiempo dando unas clases que no sirven para nada. Ese tiempo estará mejor empleado en un alumno que hace caso y se esfuerza en seguir de forma obediente la coreografía que han preparado para él, como es el caso de Manu esta semana, y por general de todos los demás menos Virginia.

No es este el único frente abierto por Virginia entre los profesores. La semana pasada Llácer le avisó que no le haría ninguna valoración en el pase de micros (justo lo que ayer hizo Myriam) tras haber faltado a una de sus clases. "Eres la única alumna que ha faltado a una clase",le dijo, sin que las justificaciones de la concursante resultasen convincentes para nadie. Al final Llàcer olvidó el incidente y sí la valoró, aunque después recordó que se había comprometido a no hacerlo. 2

En la reunión de profesores de esta semana lectiva (que aquí van de miércoles a miércoles) Manu Guix era tan claro como lo es siempre, soltando la siguiente bomba: "Yo a Virginia quiero echarla". El director musical de esta academia piensa que no ha cantado nunca bien, que no hace caso a los profesores, que promete más de lo que luego da, y en definitiva que no merece estar aquí. No es la primera vez que se expresa en este sentido, habiendo sido más duro en otras ocasiones, como cuando le preguntaba a sus compañeros de claustro: "¿Pero pensáis que ella se da cuenta de que es un petardo en el escenario?". No se corta nada Guix.

El mareo de Pablo

Si el pre-pase de micros del viernes terminó con el llanto de Virginia y Anabel, producto del descontento de ambas con sus actuaciones correspondientes, el pase definitivo de ayer estuvo marcado por el mareo de Pablo, quien tuvo que repetir su actuación al encontrarse mal durante la primera. Llàcer bromeaba más tarde y le decía que cuando había empezado a marearse él pensaba "mira si le está poniendo sentimiento". En la valoración le decían que intentase marearse el martes para conseguir un pico de audiencia, y porque además le había quedado francamente bien el resto de su actuación.

Tras su segunda actuación Pablo salió a la terraza a tomar un poco el aire porque no se encontraba bien del todo. Llàcer le dice que si sale ellos no se enterarán si se empieza a encontrar peor, a lo que el concursante responde que hay cámaras y alguien se enteraría si se vuelve a desmayar. Myriam está entonces realmente graciosa cuando se mete en la conversación: "¡Que va, que va! Es que no os creéis que el programa ha terminado y ya no está emitiendo ni nada." 3

Si bien el mareo de Pablo no se pudo ver en el falso directo del canal veinticuatro horas, sí que fue emitido sin censura esta vez el momento en que Llàcer comunica quien ha sido elegido alumno de la semana. Los profesores salieron de la sala para deliberar en esta ocasión, y tras su vuelta descubrieron la foto de Miriam en la tablilla que cuelgan de la pared cada semana. La progresión de la melillense ha sido muy notable desde el viernes, y a buen seguro motivará a muchos espectadores con un baile seco y seductor.

Cantarán con Carlos Baute

La mejor actuación del pase de micros no fue esta vez ni la de Pablo, a pesar de estar de nuevo incontestable, ni tampoco la de Mimi. Ayer conseguimos ver por fin a Anabel cantando bien y sabiendo aprovechar la ocasión. Tras un pre-pase penoso, esta concursante también supo mejorar hasta hacer que vislumbremos la que podría ser su mejor actuación en una gala, siempre y cuando no la traicionen los nervios ni el pánico escénico, como dice la remilgada Coco Comín. En cuanto a los demás, si se mantiene el nivel de ayer podemos decir que tendremos una gala mejor que la anterior, lo cual era de todo punto deseable.

Manu está desmadejado , no deja de estarlo y no parece que lo vaya a conseguir de aquí a mañana, pero su esfuerzo es admirable y vocalmente pone altísimo el nivel. A Chipper le han quitado parte de la letra del tema de Alejandro Sanz, repitiendo estrofas para evitar un mayor esfuerzo de memorización. A pesar de ello no termina de pronunciar bien, lo cual es especialmente duro cuando se trata de cantar en castellano, lengua que hablan la aplastante mayoría de espectadores. Claro que si tenemos en cuenta que a Manu, Sandra y Tania les han puesto profesora para que mejoren su dicción, lo de Chipper es casi milagroso. Según Manu la explicación que les han dado es que "tienen que poner subtítulos en los resúmenes cuando hablan ellos". Yo entiendo a estos más que a algún otro, pero esto debe ser cosa mía.

Ayer Manu les dio la cena contando chistes malos que solo a él hacían gracia. Al final terminaron riéndose al ver su risa, y también cuando Chipper le contaba a Mimi el chiste que acababa de enseñarle. Iván y Noelia casi cumplen el objetivo de hacer el gran dúo de esta edición, según los profesores, y Sandra gustó a los profesores a pesar de que vocalmente no le va nada el tema y le queda horriblemente nasal. De actitud está fantástica, como siempre. Ah, y mañana cantarán un 'medley' con Carlos Baute, que se supone visitará la academia antes. Seguro que no saldrá de allí pidiendo que le den más ("Dame, dame, dame de eso, dame más..."). Seguro que no.