El despegue definitivo

METRÓNOMO 09/06/2008 08:37

La trampa de los profesores

A pesar del alto nivel que a estas alturas han alcanzado los concursantes, el exceso en el elogio por parte de los profesores esta semana no parece que pueda deberse a otra cosa que a una estrategia de despiste con el objetivo de desconcertar al jurado. No podemos pensar ya en la teoría de los cuatro elogios compensando cada crítica sino en algo con una intencionalidad bastante mayor.

Si tenemos en cuenta que el jurado parece basarse más en las actuaciones del pase de micros de los domingos que en las que protagonizan en la propia gala, las valoraciones de los profesores cobran una importancia muy especial. Pensemos en lo siguiente: la semana que Llàcer felicita a sus alumnos en el pase de micros por la progresión observada en ellos, y luego tras gala él mismo reconoce que están muy decepcionados por el bajo nivel de las actuaciones, el jurado les felicita por haber firmado una buena gala, algo que solamente ellos vieron. Algo parecido sucedió la semana en que tras el pase de micros el director les hablaba sobre ponerse las pilas porque no habían estado a la altura, lo cual les debió motivar porque hicieron una buena gala, a pesar de lo cual el jurado les valoró en conjunto de forma bastante dura.

Dada la importancia que parece tener de cara al jurado lo que los profesores digan el domingo, no es descabellada la teoría de que ayer estuvieron especialmente complacientescon sus alumnos para intentar condicionar, de alguna manera, lo que puedan valorar el próximo martes. Eso sin contar con el juego que esta semana se han propuesto con Virginia, a la que le han estado dando su aprobación de aquella manera, así como se le da la razón a los locos. En la reunión de profesores ya quedaron en que el objetivo con ella era mejorar su sentido del humor, y no han parado de ponerlo a prueba.

Mimi y Virginia no están a la altura

Del pre-pase y el pase de micros de este fin de semana se pueden sacar varias conclusiones. La primera y principal es que Mimi no está a la altura, a pesar de que le dijeran eso de que da el pego como cantante de un grupo, que ha sabido sacar una vena 'popera' importante y toda esa ristra de elogios que ya hemos comentado sobre el supuesto objetivo de los mismos. Realmente Mimi estuvo mal y es una de las potenciales nominadas de mañana. Aunque su actitud no es mala, vocalmente está ahora mismo a una distancia abismal del resto de sus compañeros.

En cuanto a los demás, Virginia sigue dando esa sensación de fragilidad que hace temer en cualquier momento que protagonice la gran cagada (con perdón), el peor y más vergonzante momento vivido en la historia de este programa. Su voz se mantiene en el filo de la navaja, tambaleándose de forma temeraria, hasta que comienza a bailar. Realmente da saltitos en lugar de bailar y eso hace que su voz se precipite por un desfiladero camino del gran naufragio. Luego parece reponerse un poco pero al momento vuelta a brincar y la voz otra vez naufragando. Un desastre, vamos.

Pero es posible que de igual lo que quiera hacer Virginia porque visto lo visto no sería extraño que saliese elegida favorita, en cuyo caso sus saltos habrían servido tanto para sonrojar a muchos seguidores de OT como para afianzar su figura de líder de masas, gran muñidora de la inédita comunión entre los frikis y este programa. El fondo gamberro que está en el origen del tremendo apoyo que esta concursante ha logrado congregar tiene su máximo exponente en un SMS que vi hace unos días en ese canal que absurdamente sigue llamándose 'OT en directo', cuando dedica más espacio a las reemisiones y censuras varias que a respetar a sus espectadores, algo que ha demostrado no le interesa lo más mínimo. El mensaje en cuestión decía: "Virginia, China está contigo". Si es que somos unos cachondos.

La táctica de los profesores con Virginia se ha extendido al final al resto de alumnos, como ya he comentado. En su caso es especialmente exagerado, ya que en lugar de dejar de darle clases, como dijo Àngel Llàcer en la pasada gala, lo que han hecho ha sido darle la razón permanentemente, diciéndole que lo hace genial, a pesar de todo. El caso más claro es el de Myriam, que no ha puesto ni una sola pega a esa sucesión de saltos ridículos que además de no tener sentido alguno quedan patéticos y encima desequilibran su voz. Las palabras de Manu Guix ayer fueron reveladoras de esto que cuento: "Hay que felicitar a los que han elegido este tema para ti porque es una canción muy bonita y te queda muy bien". Ni una pega, ni un matiz, ni el más mínimo atisbo de un deseo por mejorar para alcanzar la excelencia de la perfección. Con ella no, esfuerzos inútiles los menos.

Grandes interpretaciones

Si por algo destaca el trabajo que han hecho la presente semana los alumnos de esta academia es por la profundización en las interpretaciones, superando incluso la calidad de las voces. En algunos casos, como el de Sandra, es algo que le salva de lo pobre que resulta su voz en los tonos más bajos. También Iván consigue trasmitir tanto su emoción que casi no se aprecia si está salpicando más o menos su actuación de gallitos porque pesa mucho más lo profundo de su efectiva interpretación. Anabel también emociona, aunque en este caso se le va aplicar más el 'chip' defendiendo un tema que ha cantado muchas veces, en el tono coplero que le es más afín. No obstante, el que los profesores la eligieran como alumna de la semana hace pensar si no será para evitar que les pueda reprochar no haberlo hecho nunca caso de irse mañana, como hizo Tania S. Esto da que pensar si no estará más cerca de la expulsión que Iván, teniendo en cuenta que tampoco ha sido alumno de la semana nunca. Estuvo, eso sí, en una terna que contaron estuvo compuesta también por la elegida, Mimi y Virginia. De coña, o sea.

Manu no emociona porque de su tema apenas se puede sacar nada. No se puede decir mucho más que no sea lo de Guix ayer: "Superas al original". Escuchando la canción de Rihanna que Manu Castellano eligió para la gala cero e interpretó de forma colosal, y atendiendo al Manu de hoy, podemos sacar la conclusión de que ha aprovechado bien las clases de la academia, ya que si ya cantaba bien ahora está camino de esa perfección tan lejana para otros. No se puede decir lo mismo de un Chipper al que esta semana Llàcer quiere extremadamente 'sexy' sin que el americano lo consiga, y que vuelve a tropezar con el falsete, dejando de nuevo una sensación de repetición y aburrimiento que hace pensar en la posibilidad de que haya alcanzado ya su techo, sin muchas posibilidades de mejora.

La canción del agua

Noelia ha vuelto a ser la que en las primeras semanas nos sorprendió por su potencia y la solvencia de su voz. Ella es un seguro de vida como cantante, logre brillar más o menos, y con el tema de esta semana sí que lo hace. El caso de Pablo fue especial esta semana, el viernes estuvo bien y ayer no tanto. La explicación es muy sencilla, y es que estos días se le ha visto más ocupado en la grabación del tema dedicado al agua, adaptación de su 'hit' por petición de los organizadores de la Expo de Zaragoza, que se comprometió a producir Kike Santander. Al final la intervención de Santander se ha reducido a un seguimiento vía telefónica, y ayer cuando el músico malagueño bajaba al pase de micros venía con la cabeza embotada tras una larga conversación Miami-Barcelona.

De entre las horas de estudio de grabación y la charla con Santander no sé que será más cansada y abotargante, pero me temo que más bien lo último. Esta pudo ser la razón por la que primero Pablo llega tarde al pase de micros, luego lo hace sin cuidar su aspecto personal y finalmente (tras cambiarse de ropa por indicación del director de la academia) canta con la sensación de estar escuchándose como metido en un armario. No obstante lo hará bien mañana, como acostumbra. Y un apunte para hacer honor a la verdad y no ser del todo injustos, la última visita a la academia elevó el nivel de forma contundente. Los chicos de Guarana se han marcado un mini-concierto de lujo. Esta vez sí.