Verdeliss no solo es influencer y madre de ocho hijos, sino también una exitosa empresaria que puede presumir de que las oficinas de su marca de dermocosmética, Green Cornerss, se encuentran en uno de los cinco rascacielos de la zona de Cuatro Torres de Madrid. Hasta allí se desplaza puntualmente la exconcursante de 'GH VIP' para reunirse con los trabadores de su empresa y en esos viajes de trabajo suele contarles las novedades a sus seguidores, a los que muestra cada vez menos cosas de su vida familiar y más cosas de su vida laboral o como corredora de maratones.
Normalmente, los comentarios de estas publicaciones en las que habla de su empresa se llenan de elogios hacia su firma y hacia su labor como empresaria, pero en esta ocasión a la navarra le ha dolido mucho ver un comentario muy poco empático: "¿Sabe que tiene ocho hijos esta tía?"; ante al que no ha querido quedarse callada: "Soy la madre de esos hijos, no la tía. Y sí... trabajo, me desvivo y me dejo el alma, último aliento y renuncias por y para ellos. Que tú no lo veas no significa que no exista. De hecho, no tienes ni puñetera idea. Hala, ¡paz y amor!".
"A mí es que me tocas la fibra...", reconocía Verdeliss tras dar esta respuesta que le ha nacido porque siente que es tremendamente injusto que le recriminen que se desplace a Madrid por motivos laborales y que no esté continuamente en Pamplona con sus hijos. Con sus palabras, la influencer ha querido dejar claro que el hecho de estar siempre con ellos físicamente no quiere decir que todas sus acciones no se dirijan a conseguir lo mejor para sus niños.
Esta situación le ha recordado a un episodio de su vida que ha querido rescatar para señalar las diferencias que existen todavía cuando se habla de cuidados y es el periodo en el que vivió separada de su marido, Aritz Seminario: "De 2014 a 2016 vivimos separados. Teníamos cuatro hijos y estaba embarazada de la quinta y sexta. Fueron dos años en los que yo viví en Pamplona sola con los peques. Los criaba y los atendía sola. Dos años en los que Aritz vivía en Madrid y viajaba para ver a su familia únicamente los fines de semana".
"Dos largos años en los que nadie, repito nadie, le cuestionó como padre. Dos largos años en los que nunca, repito nunca, escuchó la pregunta: '¿Y los niños con quién se quedan?'. Ignorante de mí pensar que algo habíamos evolucionado", ha lamentado la influencer, que ha recordado que no porque suba menos contenido con sus hijos los atiende o cuida en menor medida que lo hacía antes.