Karmele Marchante se encuentra en una misión especial en Perú, una viaje diplomático cuyo objetivo es restablecer las relaciones entre el programa 'Amor, amor' y 'Sálvame'. La colaboradora llevaba dos días allí cuando, por fin, la vimos en el plató del programa. Sin embargo, estaba sola, explicaba que los presentadores habían desaparecido y se preguntaba cómo iba a firmar la paz. Sin embargo, reiteraba su intención y entonces llegaban. Sofía le daba dos besos, Peluchín también y esperaban tras ella pero entonces dejamos de ver lo que sucedía. Un técnico anunciaba que el programa siguiente debía comenzar y pedía finalizar la conexión. Dicho y hecho.
Tras esto, 'Sálvame' arrancaba 24 horas después mostrando cómo se gestó la conexión. Tuvo que interrumpirse porque 'Amor, amor, amor' comenzaba. Sofía Franco y Peluchín interrogaban a Karmele sobre sus compañeros, refiriéndose a Belén Esteban le preguntaban: "¿Tu compañera es así sobria?", ella pedía que no hablaran así, pero entonces denominaban "abuelita" a Mila, a lo que Karmele respondía: "No la llamen abuelita".
Marchante continuaba quejándose: "Cuando he llegado me habéis dejado sola, no me habéis hecho ni caso" y Sofía Franco tomaba la palabra para decir que los peruanos "no somos maleducados (...) Nosotros sí tratamos bien a nuestros invitados". La presentandora también decía por qué la conexión había tenido que ser interrumpida: "Ellos salieron al aire, nos quiren dejar como unos maleducados, cinco minutos antes hicieron el enganche". Peluchín añadía que todo había sido "un malentendido", y que por el cambio de hora "teníamos que salir al aire". Finalmente, Karmele decía: "Veremos si mañana vuelvo porque si estáis tan así conmigo no podemos firmar la paz". Peluchín le replicaba: "Si usted quiere volver, las puertas de este estudio están abiertas para cuando regrese".
La colaboradora salía de plató y los presentadores grababan un mensaje para los colaboradores de 'Sálvame' tras la primera intervención de su compañera. "Creo que la han mandado a que la pase bien pero viene arrastrando sentimientos negativos de sus colaboradores", comenzaba a decir Sofía, "no se ha tomado la molestia de pensar qué ha pasado, solo se acuerda de lo que le contaron, viene acá sin fundamento", continuaba Peluchín. El presenador cree que deberían haber puesto en antecedentes a Karmele sobre lo ocurrido entre ellos porque "hace intervenciones que son como para no tomarlas en cuenta". Ambos sabían que Karmele va a defender a sus compañeros, y no se mostraban temerosos: "Que manden a Karmele, a los dos ‘Kikos’, a Mila, a Belén, en verdad la cabeza que queremos es la tuya Belén”.
Obviamente, desde España, BelénSe mostraba dispuesta a viajar a Perú pero también a decirles un par de cosas: "ya está bien el 'Peluchón' este que me diga, he podido hacer muchas cosas en mi vida pero beber en mi vida, ya te diré yo lo que haces en el mercado de Fuencarral". Mila Ximénez también tomba la palabra: "Me voy a dirigir a Peluchín que tengo que decirle que se quite el nido de la cabeza porque van a criar los pollos que tiene aquí dentro (...) Te pediría que me conocieras en persona y en la intimidad porque si me ves ahora mayor que estoy con la dentadura, los pañales y maquillada, imagínate como es si no me dan camerino y no tengo dónde maquillarme y sin la faja".
Finalmente, se produjo la conexión en directo con 'Amor, amor, amor'. Karmele estaba acompañada esta vez por los presentadores. Paz Padilla quería saber cómo se había sentido durante la última conexión: “triste no, estaba abandonada y sola y no me hicieron ni caso, no tenía armas para organizar lo de la paz (…) Me sentí desolada, a punto de tirarme por la cima de los andes”, bromeaba. Pero este comentario parecía ofender a los presentadores y Sofía explicaba: “hay que hacer una corrección porque si la embajadora de la paz inicia estos enlaces con un conflicto es un poco absurdo, fue una falta de coordinación cuando coordinamos bien no le faltamos”. Peluchín también quería aclarar: “hay una malinterpretación, iban a hacer un enlace corto en el que íbamos a saludar y lo que hicimos fue lo que habíamos pactado".
Aclarado el asunto, Peluchín se mostraba ofendido con Karmele por sus palabras: “ha dicho si no se le ha ofrecido agua, si no se le ha ofrecido camerino…” y Karmele apuntaba: “Bueno, eso es verdad”. Sofía no estaba dispuesta a que se menospreciara al canal: “Aquí hay uno para todos los programas y hay que adaptarse para lo que hay”. Pero había otro conflicto, según Peluchín, Karmele no había querido ser atendida por nadie para maquillarse y Karmele le daba la razón porque ella se peina y se maquilla sola. La colaboradora parecía alterarse y utilizó en Perú una técnica habitual en España: levantarse y andar por el plató. “¿Eso es una terapia para que la señora se relaje?”, preguntaba Peluchín, y Karmele entraba de nuevo.
Pero el conflicto volvió. Belén Esteban tomaba la palabra: “¿Dónde quiere poner mi cabeza y lo de ebria porque te voy a decir….” Rodrigo respondía: “He dicho que si normalmente hace esas muecas yo no he hablado de eso, solo pregunté si usted es así sobria”, “son gestos típicos de una persona activa”, intentaba mediar Karmele, pero Belén no estaba dispuesta a dejarlo así: “¿Y mi cabeza dónde la queréis?”, “aquí hay espacio [decía Rodrigo señalándose la cabeza] no sé si la tuya está bien amueblada”, el presentador acababa hablando de educación y Belén zanjaba: “¡Tú tienes educación porque no te he llamado borracho!”
Y le tocaba el turno a Kiko Hernández: “A pesar de que Karmele dice que Kiko Hernádez ha evolucionado a mí me parece un Australopithecus”. Y Kiko alzaba la voz: “Has dicho que antes no tenía ni para comer pipas ahora tampoco”, “¿Tan mal pagan en Telecinco?”, replicaba el aludido, “a mí nunca me ha faltado para comer, a lo mejor estás hablando de ti, chaval”, se defendía Kiko de nuevo.
La conexión tenía que interrumpirse por motivos de publicidad y luego no podían retomarla porque ‘Amor, amor, amor’ había tenido que empezar su emisión. Pero el viernes 22 habrá más.