'Sálvame' recibió la llamada de alguien que se identificaba como mediador para vender un material. Se trataba de unas fotografías de la primera boda de la Princesa de Asturias y el programa se reunía con él para averiguar quién estaba tras la venta de las instantáneas. Esta persona, un hombre, daba pistas sobre la identidad del dueño de las fotos y pedía 600.000 euros. Sin embargo, el programa pudo averiguar que las pistas apuntaban en otra dirección.
Finalmente, Ángela Portero afirmaba que la persona que querría venderlas era presuntamente del entorno de Doña Letizia Ortiz. Además, apuntaba al periodista Jaime Peñafiel como la persona a quien, en primer lugar, llamó el intermediario. El periodista solo reconocía haber recibido una llamada en la que le comentaban el material que tenían y le preguntaban cómo hacerlo llegar a la revista '¡Hola!'. Jaime Peñafiel afirmaba que su función se limitó a dar un consejar y a decir que se pusieran en contacto con 'Sálvame', nada más, ni si quiera conocía a la persona que se puso en contacto con él.
Finalmente, Kiko Matamoros aseguraba saber cómo se había gestado esta presunta traición a la Princesa: "Las fotos de Letizia Ortiz, de su boda, son las que pertenecen a Henar", afirmaba. El colaborador hacía alusión a Meli del Valle, prima de la Princesa, quien afirmaba que nadie de la familia da por hecho que fuera Henar quien quisiera vender las instantáneas: "a mí me parece muy bien que su familia, y más públicamente, intente exculparla pero tiene difícil defensa".
El colaborador iba más allá. Explicaba quién se ha puesto en contacto con los medios: "El primer intermediario y diría que único, que no interviniente, es su amigo Jose Saavedra y se fragua el contacto con Jaime Peñafiel en el despacho de su hermano Javier". Jaime Peñafiel, a quien veíamos a través del plasma, parecía negar: "Puedes decir misa en latín, en gregoriano pero lo que estoy contando me lo cuenta un señor que estaba ahí", afirmaba Matamoros.
Según ha podido saber Matamoros por su fuente "en el despacho de Javier Saavedra se decide el precio que se va a poner a ese material, se determina una comisión para uno de los intervinientes que es del 30% y se decide que el hombre para intentar llegar a los medios, como muy bien ha contado Jaime Peñafiel, es Jaime Peñafiel". Sin embargo, el colaborador quería dejar claro que fue José Manuel, y no su hermano: "Es el hermano de Javier Saavedra quien, porque Javier no interviene, llama a Jaime Peñafiel, no sé si se identifica o no".
"Es el hermano de Javier Saavedra, es el que contacta y es el que le dice que quiere poner en circulación esas fotos", continuaba diciendo. Por ello, Matamoros concluía que la intervención de Jaime Peñafiel "es blanca", lo único que hace es "llamar al programa y dice 'aquí tienen el teléfono de este señor".
Minutos más tarde, intervenía el abogado Javier Saavedra: "Cuando he llegado a mi casa he tenido conocimiento de algo que se está diciendo de una manera falsa e inveraz", comenzaba. El abogado quería desvincularse completamente: "No tengo absolutamente nada que ver en este asunto y si no he hecho ningún comunicado es porque no he tenido conocimiento de que se me estaba relacionado con un asunto que evidentemente tengo que condenar absolutamente, nada tengo que ver y lo peor es que se me tenga por tonto".
El abogado quería saber el por qué de las afirmaciones de Matamoros y quién se lo había contado y pretendía saberlo en los tribunales: "a partir del lunes nos veremos en los tribunales, el lugar más adecuado cuando se dan noticias de este calibre", anunciaba el abogado, "seguramente nos explicarán quién en el despacho escuchó los argumentos que nos ha dado el señor Matamoros". Además, Saavedra reiteraba que todo "es absolutamente falso, nada tengo que ver con este asunto y además estoy en contra de que se puedan comprar o vender temas que afecten a la intimidad de las personas".
"El señor Matamoros en el juzgado me contará usted quién se lo dijo", decía Javier y Matamoros replicaba: "Y antes, te he llamado hoy y no me has cogido el teléfono", le explicaba. El abogado no coge llamadas que no conozca, pero hubiera hablado con él dado que cuando se han encontrado siempre ha habido "un saludo amable".
Sin embargo, Matamoros quería matizar: "no he dicho que hayas querido llevarte un duro, al revés, he dicho que como a mí eso no me consta ni tan si quiera quien me ha facilitado esa información me lo ha dicho no lo puedo decir", explicaba. Además, el colaborador preguntaba al abogado: "¿Tu hermano se presentó en el despacho, te hizo conocedor de que tenía unos documentos que se querían vender que eran las fotos y tú le facilitaste el teléfono de Jaime Peñafiel?", y Saavedra negaba rotundamente: "Es absolutamente falso porque además mi hermano no tendría que ir al despacho para hablar conmigo. Al señor Matamoros, con todo el respeto, lo ha intentado alguien manipular".
"No entro en esos temas, no es mi estilo, cometeré otros errores pero desde luego no participo", decía Javier, "cada uno hace lo que quiere con su vida y yo no puedo ser el guardián de mi hermano y saber lo que hace alguien con 65 años".
Finalmente, Javier decía que hablaría con Matamoros y respondía a una última llamada: "¿Se extrañaría de que su hermano estuviera con esta historia?", le decían; "No voy a entrar, permítame", respondía.