Jorge Javier ha dado paso a Belén Esteban nada más empezar 'Sálvame Deluxe' para que explicara a los espectadores lo mismo que le había dicho a él la noche anterior en un estado de alarma. Belén Esteban ha pasado a narrar los hechos sin estridencias:
"A lo mejor es una coincidencia, yo no tengo miedo. Pero estaba mi suegro en el bar y recibió una llamada de un señor, un señor serio, que dijo que dejara yo de hablar de Rodríguez Menéndez porque si no Fran y yo y el negocio iban a tener consecuencias".
No es la primera vez que en el bar 'El rascacielos' de Fran Álvarez, marido de Belén, se reciben llamadas de toda índole, sin embargo, lo que ocurrió después dio crédito a la amenaza:
"Tampoco le di importancia. Llama mucha gente al bar. Al rato se presentó la policía porque había una amenaza de bomba en el bar de mi marido, que es un bar de barrio. Vino la policía con unos perros y no había nada. Dijeron que lo iban a investigar".
Los nervios de su suegro
En todo momento, Belén ha tratado de guardar cierta cautela. No ha querido relacionar al abogado prófugo de la justicia española, Rodríguez Menéndez, con lo sucedido. Pero lo que más le preocupa es que se involucre a la policía en un tema de este calibre:
"Quiero dar gracias a la policía, porque, qué gente gente más malvada hacer esas bromas. La policía tener que aguantar estas tonterías de que sea mentira Te pones a pensar cosas, pero ante todo es que es el bar de mi suegro. Te da miedo. El asunto es que las dos cosas pasaron el mismo día".
Para Lydia Lozano, lo más destacado es que, aunque no haya bomba, se está amenazando a Belén Esteban. Kiko Matamoros, por su parte, es más gráfico: "Es muy posible que las dos llamadas tengan relación. Y que tengan relación con él que tengan lógica. Una cosa es la amenaza y otra cumplirla. Qué pensar de una persona que deja al borde de la muerte a su hijo y su novia".