Cuando Sergio Alis tocó fondo vino para contar que estaba vivo de milagro. Asegura que se quedó sin nada por su adicción a las pastillas para dormir. Decidió ingresar por cuenta propia y al llegar le ataron en una cama y le subieron a la planta psiquiátrica. Nos ha confesado que lo pasó fatal y que no le gustaría volver a revivir todo aquello”.