Todos contra el Golosina tras escuchar a Santi

TELECINCO.ES 01/06/2009 10:57

El Golosina empezó el debate diciendo que iba a defender a Matías, que era quien le había sacado del agua: "Cada uno mira a quien quiere porque éste es un programa democrático", apostilló.

Pero cuando llegaron las palabras de Santi se volcó contra él. El baloncestista soltó perlas como: "Me hubiese gustado ganar", "No me han superado", "Me considero más trabajador y colaborador", "Tengo que asumir que no he sido el mejor" y "Ha habido estrategia"; que sepan que: "Santi se ha marchado, separado, pero no Santo estaba hambriento y enfermo y no hace triunviratos y cuartetos porque esa es su personalidad": "De quién me hago amigo" demasiadas influencias, demasiadas trampas para el concurso, que es el real".

La respuesta del Golosina no se hizo esperar: "Santi cuando venga la semana que viene en mi cara va a decir si no hicimos chanchullos. Santi me dijo, Juan, yo creo que tenemos que ganar los tres. También de alguna manera toreaba el toro para su parte".

Los tertulianos, con Santi

Una de las primeras voces en alzarse a favor del baloncestista fue la de Lecquio: "Ante la edición más dura y más sucia, aquí todo el mundo aprovecha la expulsión para llenar de mierda a todos sus compañeros. Es cierto que Santi se ha comportado tal y como es y no ha ido con ningún grupo, tiene mi aplauso".

Después vino Antonio Casado: "Me parece muy feo Juan, que parece que decías que Santi había robado. Aquí todo el mundo va con un contrato firmado y sabe lo que tiene que hacer y al que le pillan está engañando no sólo a productora, también e la audiencia. Que cree que lo está pasando muy mal y luego está robando".

Golosina: "Hacía lo que podía"

En este punto, le preguntaron al Golosina si le hacía gracia haber estado haciendo de comparsa cuidando el fuego para que no se apagase cuando luego se ha sabido que Escassi tenía un mechero. Su respuesta: "Yo hacía lo que podía".

Aunque Escassi salió a ayudar a su amigo, que antes se había arrodillado ante él, para decirle que mientras Juan no dormía para cuidar el fuego, él se levantaba cinco veces a encenderlo.