Cris y Betty no se esperan lo que está a punto de ocurrir... ¿Volverán a casa con cero euros?

"Somos diez hermanos y la economía familiar nunca ha sido buena", han sido las palabras de Cris para resumir su situación económica. Tía y sobrina llegan a 'The Wall' con un sueño muy claro. La enfermedad de la abuela ha mermado en la familia y el objetivo de estas gallegas es comprar una casa y, si sobra algo dinero, comprar una silla eléctrica para que la matriarca recupere parte de su movilidad. La sacrificada vida de los abuelos podría tener su recompensa esta noche, así nos lo cuentan Cris y Betty entre lágrimas. Suerte que siempre está presente Carlos Sobera para sacarles una sonrisa a los participantes.

Llelagaba el momento de conocer a los familiares que han acompañado a Cris y Betty al plató de 'The Wall'. Jesús y Carlos, marido y hermano de Cris, acompañan a las concursantes de esta semana. Carlos Sobera pronto ha llamado poeta al marido de la participante, pues le consta que le regaló una llave a su mujer, la cual "abría su corazón", nos cuenta. Pero no todo ha sido tan fácil entre ellos, porque Jesús reconoce que le costó tres años tener una cita con Cris. El presentador le ha preguntado si es que no le gustaba en un principio y ella ha reconocido abiertamente que no. Momentos más tarde, el humor de Sobera sigue permanente al saber Carlos es el único hijo varón de entre 10 hermanos.

Al ver las posibles respuestas, Cris ha decidido triplicar el número de bolas, sin saber cuál era la pregunta. El cine y el deporte eran los grandes protagonistas de esta cuestión y Betty ha acertado la respuesta. La participante se ha venido arriba en seguida, al ver que el muro tornaba a un color verde, dando por válida su respuesta. Pero, ¿qué habrá pasado con las bolas? ¿Habrán sumado mucho dinero al marcador?

La situación era difícil. Tras unas malas jugadas, que han restado dinero al marcador, éste se ha quedado a cero euros. Betty, que había permanecido aislada y contestando a las preguntas del muro, ha tenido que tomar la difícil decisión que firmar el contrato valorado en más de 10.000 euros o romperlo y aceptar la cantidad de dinero final, sin saber cuál era. La esperanza de Cris era que su sobrina hubiera aceptado el dinero obtenido en la primera fase, pero lo cierto es que su sobrina tenía otras noticias para ella. ¿Cómo habrá reaccionado? Atención a la respuesta de Carlos Sobera tras ser testigo directo de esta escena.