El público elegirá cada noche al ganador en 'Todo el mundo es bueno'

telecinco.es 22/06/2012 22:49

Cada edición de “Todo el mundo es bueno” combinará la exhibición del talento de personas anónimas en distintas disciplinas -cantantes, humoristas, monologuistas y artistas con habilidades peculiares- con las sorprendentes y divertidas situaciones que se desprenderán de sus actuaciones. La misión de cada uno de ellos será permanecer sobre el escenario durante 120 segundos, sin que el público

-encargado de decidir el éxito o fracaso de cada concursante- les expulse.

Para poder pronunciarse sobre los números que presenciarán in situ en cada entrega, cada integrante del público contará con un mando que les permitirá votar a partir de los primeros 20 segundos de cada actuación. Si a lo largo de los 2 minutos de su número un participante recibe al menos el 50% de votos negativos, éste deberá poner fin a su actuación y será eliminado de forma espectacular y fulminante.

Sin embargo, aquellos concursantes que superen la votación del público durante su actuación se clasificarán para la gran final de la noche, en la que tendrá una segunda oportunidad en un tiempo máximo de 60 segundos para demostrar sus habilidades y convencer al público de su valía. De nuevo será el jurado popular el que a través de sus mandos decidirá quién se convierte en el ganador de cada edición y reciba los 15.000 euros de premio.

Sorprendentes y divertidas eliminaciones de concursantes a cargo de los espectaculares efectos especiales de un reconocido especialista: Reyes Abades

Caer por una trampilla situada en el centro del plató, ser lanzados contra una pared de ladrillos o ser “engullidos” por una columna de fuego de dos metros. Éstos serán algunos de los espectaculares métodos que “Todo el mundo es bueno” utilizará para eliminar a los participantes cuyos números no hayan conseguido la aprobación de al menos el 50% del público presente en el plató. Estos modos de eliminación, que pondrán a prueba el sentido del humor de los concursantes, han sido creados y supervisados por Reyes Abades, experto en el sector galardonado con nueve Premios Goya en sus más de 35 años de experiencia en la producción de efectos especiales.

A estos sistemas de expulsión se sumarán también otros efectos generados mediante herramientas digitales, que permitirán al espectador ser testigo de cómo los participantes desaparecen del escenario “aplastados” por una gran bola de metal y un yunque o salen “despedidos” empujados por un gran cohete.

Además, los concursantes que hayan recibido durante su actuación más del 50% de votos negativos también podrían tener que vérselas contra los fornidos integrantes de un equipo de fútbol americano.