Hace algo más de un año Julián Muñoz abandonaba la prisión en la que cumplía condena por una presunta enfermedad que ponía su vida en riesgo. Ahora, el exalcalde ha experimentado una mejoría casi milagrosa. Coches de alta gama, comidas en restaurantes de lujo y toda clase de lujos que nada tienen que ver con la situación que Julián Muñoz aseguraba tener.